Reuniré el resto de mis ovejas y les pondré pastores . Profeta Jeremías 23,1-6
Al Salmo 22 responderemos: El Señor es mi pastor, nada me faltará.
Él es nuestra paz, él ha hecho de los dos pueblos una sola cosa. Lectura de San pablo a los Efesios 2,13-18 |
Marcos 6,30-34 Andaban como ovejas sin pastor
En aquel tiempo, los apóstoles volvieron a reunirse con Jesús y le contaron todo lo que habían hecho y enseñado. Entonces él les dijo: «Vengan conmigo a un lugar solitario, para que descansen un poco». Porque eran tantos los que iban y venían, que no les dejaban tiempo ni para comer. Jesús y sus apóstoles se dirigieron en una barca hacia un lugar apartado y tranquilo. La gente los vio irse y los reconoció; entonces de todos los poblados fueron corriendo por tierra a aquel sitio y se les adelantaron. Cuando Jesús desembarcó, vio una numerosa multitud que lo estaba esperando y se compadeció de ellos, porque andaban como ovejas sin pastor, y se puso a enseñarles muchas cosas.
Pensando en voz alta
Un día pregunté a los niños durante la misa sobre cuántos de ellos querían ser sacerdotes. Ninguno levantó la mano. Ante tal extraña reacción les interrogué sobre el porqué del rechazo. Su respuesta fue más que contundente: Porque se trabaja mucho. Hay que hacer mucha misa. Se gana muy poco…
En el Evangelio de hoy Jesús invita a los suyos a descansar
- Mucho cuidado con las vacaciones.
- Son tan descansadas que nos olvidamos de Dios.
- También mucho cuidado con obsesionarnos con el trabajo y no tengamos tiempo para descansar.
Sigamos al Señor Jesús
- Pero sin fanatismos.
- Con claridad en la oración y dando respuesta a la llamada.
- Seguirlo es aceptarlo y aceptarlo en vivir como él.
- Tengo el convencimiento personal que Jesús va al ritmo que cada uno puede andar...
Quien se deja cansar por la predicación del Evangelio terminará por rechazarlo
- Somos muchos que queremos una religión a la medida.
- Por eso andamos como ovejas sin pastor.
- Otros buscan respuestas intelectuales apara las cosas de Dios.
Una oveja sin pastor
- No puede encontrar el camino, ni pastos, ni agua.
- Tampoco tiene defensa frente a los peligros que le acechan.
- Esta es la realidad permanente del ser humano alejado de Dios.
- Existe mucha tristeza, desganas de vivir, ansiedad, depresiones…
- Hay un profundo vacío religioso.
- Jesús siente compasión por esas personas.
- El Señor se nos ofrece como el pastor de nuestras vidas.
- El pastor no hace el camino por nosotros, lo que hace es caminar con nosotros.
Dios, como Pastor, quiere ser guía en el mar de las confusiones.
Muchos con poca fe
- Tan poquita que cualquier problema los vence.
- Y esa fe nos les llena ni les da motivos para ser felices.
- También existen los cristianos tan implicados en el mundo que dejan de oír la llamada del pastor.
- En el fondo el seguimiento de Jesús es siempre un tema de fe, madurez humana y equilibrio personal.
- Estos tres elementos son los que faltan en la vida de muchas personas, de ahí la compasión de Jesús.
Hay mucho ruido
- ¿Desde cuándo no experimentas un profundo silencio?
- Dicen que el silencio es precioso
- ¿Pero quién lo necesita?
- Jesús en el evangelio de hoy invita a sus discípulos a un sitio tranquilo para descansar con Él.
Este aparte, este tiempo de paz y oración, de quietud y descanso es tan necesario como el respirar.
Quieres conocer a alguien
- Es saber lo que hace en su tiempo libre.
- Más importante que lo que uno hace es saber quién eres cuando no haces nada.
- Aquí en esta Santa Misa nos podemos encontrar con la respuesta a un tiempo libre bien invertido.
- Aquí descansamos de nuestro trabajo y de nosotros mismos.
- Aquí recordamos todo lo que Dios ha hecho en la creación, en Jesús, en nuestras vidas…
- Aquí descansamos en los brazos de Dios.
Vivimos en la tragedia del tiempo
- El reloj nos esclaviza
- Nos atrapa en sus segundos, minutos y horas.
- Durante seis días, estamos divididos entre la avaricia y la necesidad, entre el ruido loco en nuestras cabezas y el silencio oracional del corazón.
Señor, los domingos, danos descanso, danos tiempo, danos paz y sabiduría.
Nada de lo que nosotros podemos hacer nos hace más valiosos de lo que Dios ya nos ha hecho a cada uno.
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Ceviche de pescado
Filetear y desespinar el pescado. Luego cortarlo en forma de dados pequeños. Sumergir el pescado en agua con sal para eliminar las impurezas. Colocar los trozos de pescado en una fuente, agregar los dientes de ajo y el ají verde molido, cebolla. Revolver. Exprimir los limones sobre la fuente, sazonar con sal y dejar macerar por 20 minutos. Agregar la cebolla, el perejil y el cilantro picado. Exprimir un poco más de limón. Adornar con lechuga y ají picado o rajas de ají picante al gusto. Acompañar con Maíz.
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