Isaías 55,10-11 La lluvia hace germinar la tierra
Salmo responsorial: 64 La semilla cayó en tierra buena y dio fruto.
Romanos 8,18-23 La creación, expectante, está aguardando la plena manifestación de los hijos de Dios |
Mateo 13,1-23 Salió el sembrador a sembrar
Aquel día, salió Jesús de casa y se sentó junto al lago. Y acudió a él tanta gente que tuvo que subirse a una barca; se sentó, y la gente se quedó de pie en la orilla. Les habló mucho rato en parábolas: "Salió el sembrador a sembrar. Al sembrar, un poco cayó al borde del camino; vinieron los pájaros y se lo comieron. Otro poco cayó en terreno pedregoso, donde apenas tenía tierra, y, como la tierra no era profunda, brotó en seguida; pero, en cuanto salió el sol, se abrasó y por falta de raíz se secó. Otro poco cayó entre zarzas, que crecieron y lo ahogaron. El resto cayó en tierra buena y dio grano: unos, ciento; otros, sesenta; otros, treinta. El que tenga oídos que oiga." |
La Palabra de Dios en nuestra vida
- Muchos a espaldas de la Palabra
- No tener en cuenta la palabra debilita mucho nuestras fuerzas espirituales.
- Para referirse a la importancia de la palabra el Señor acude a las parábolas.
- Las parábolas son un modo de enseñar muy corriente y muy provechoso, a la vez de ser muy agradable de escuchar y fácil de recordar.
- La parábola instala el mensaje en el inconsciente de la persona.
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Jesús nos propone un acercamiento vital a la palabra de Dios.
- ¿Qué lugar ocupa la palabra de Dios en tu vida diaria?
- ¿Eres capaz de leer, meditar e intentar vivir la palabra?
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La palabra se reparte pero cae en desigual terreno.
- Es la misma palabra pero cada persona se tiene que convertir en tierra para que germine.
- Además todos debemos aprender a conocer la Palabra.
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La historia del sembrador.
- Es la historia de una semilla.
- Donde el sembrador es Jesús.
- La semilla es la Palabra de Dios.
- La tierra es el corazón.
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Jesús sembró
- El amor de Dios.
- La semilla del Reino, de la paz y del perdón.
- Y sembró todos los corazones.
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Hoy sigue sembrando nuestros corazones con su Palabra a través del Espíritu Santo y de la Iglesia.
Vivimos en una sociedad de venta y compra
- Todos tiene algo que vender y que comprar.
- Jesús no viene a vendernos nada.
- Nada de tontos ofrecimientos.
- Viene a plantar la semilla del amor en el corazón.
- Y nos alegramos porque esta semilla ha dado y sigue dando frutos de salvación.
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La Palabra de Jesús no es una palabra como la suya o la mía, es una palabra eficaz, de amor, una palabra que se hace silencio en la cruz y nos riega con sangre.
- El terreno para acoger la semilla no es la cabeza, es el corazón.
- Aquí estamos nosotros los de San Antonio de Padua
- Hemos venido, no a escuchar una palabra, hemos venido a acoger la Palabra, a darle hospedaje en nuestros corazones, hemos venido a regar la tierra seca y dura de nuestra vida.
- Aquí venimos nosotros los domingos a darle gracias a Jesús por la semilla que hace años plantó en nuestra vida.
- Venimos a pedirle al sembrador que nos ayude a dar los frutos buenos de la responsabilidad de padres, de la fidelidad de esposos, de la preocupación de los hijos, del trabajo bien hecho, del amor a la iglesia, de una fe cada día más viva y compartida.
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Hay una persona que me llama por teléfono y me dice: mi esposo va a su iglesia los domingos y lo pasa bien, pero no le sirve de nada, no cambia, es más duro que el asfalto.
- Debemos producir frutos.
- Nada de apariencias.
- El misterio de la respuesta a Dios.
- El misterio de la libertad humana.
- No todos somos tierra buena.
Preguntan a un agricultor
En cierta ocasión, un reportero le preguntó a un agricultor si podía divulgar el secreto de su maíz, el cual ganaba el concurso al mejor producto año tras año. El agricultor confesó que se debía a que compartía su semilla con los vecinos.
¿Por qué comparte su mejor semilla de maíz con sus vecinos, si usted también entra al mismo concurso año tras año? preguntó el reportero.
Verá usted, dijo el agricultor, el viento lleva el polen del maíz maduro, de un sembrado a otro. Si "mis vecinos cultivaran un maíz de calidad inferior, la polinización cruzada degradaría constantemente la calidad del mío. Si voy a sembrar buen maíz, debo ayudar a que mi vecino también lo haga"
Entonces el terreno donde debe caer la semilla
- Es el corazón humano.
- Pero sabemos que no todos los corazones están hechos ni preparados para lo mismo.
- Las inquietudes, deseos, miedos, ambiciones, son las encargadas de dar base a nuestro interior.
Clases de terrenos (Corazones)
• Terreno junto al camino : los que oyen pero no entienden. La palabra no cala en ellos, no hay mayor interés en profundizar. Están distraídos, poco interesados en lo que oyen.
• Terreno entre espinos : aventaja a los dos anteriores: recibió la semilla y dejó que echara raíces hondas, pero tampoco dio frutos debido a los estorbos que encontró en su crecimiento.
• Terreno bueno : es el resultado lógico del encuentro de una buena tierra con una buena semilla. Este es el que oye y entiende la palabra, y da fruto.
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Arroz con pollo especial
Se lava el pollo y se pica en trozos, se secan y se le coloca sal para luego sofreírlos. Con algunos huesos del pollo se hace un caldo. Aparte un caldero con margarina y un poquito de aceite y se coloca ajo, ají dulce, apio españa se deja dorar. Se agrega el pollo, cúrcuma y el arroz se mezcla bien para que después colocar el caldo y dejarlo cocinar. Se adorna con tiras de pimentón y arvejas tiernas. |
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