Llegan días de sentimientos encontrados.
He aquí, le traeré salud y curación, y los sanaré y les revelaré abundancia de prosperidad y seguridad. (Jeremías 33, 6)
Hay situaciones duras y recuerdos que fácilmente no se olvidan de la noche a la mañana. Diciembre lindo mes y momento grande para celebrar en familia. Pero... la distancia con los que se han ido buscando porvenir, la enfermedad que nos arropa, la pobreza que nos acorrala, los hijos que no terminan de comprender, el matrimonio que tambalea por la dureza de las palabras, lo duro de la muerte del ser querido y la pandemia que va a pasos agigantados. Todo eso, Señor Dios, es lo que nos agobia y no nos permite celebrar como es tu voluntad.
Hoy Señor me uno a los que dejaron morir la fe y se fundieron en la desesperanza para que les animes y vuelvan a la paz que tanto necesitan.
No temas: yo estoy contigo; no temas: yo soy tu Dios; te fortaleceré,
te ayudaré, te sostendré con mi diestra victoriosa. (Isaías 41, 10)
Padre Marcelo. @padrerivas
2020 diciembre 20