Dime que te cuento y te diré que aprendes Padre Marcelo Rivas Sánchez Desde aquí, “Cumaná” tierra de gracia, me imagino a aquellos pastores, tan humildes, tan sencillos e incluso despreciados por el trabajo que realizaban, ante aquella voz que venía de Dios y que los invitaba a presenciar el nacimiento del Hijo de Dios, el Salvador de la humanidad. “Les anuncio una gran alegría…” (Lucas 2,10) Para que al instante con miel, leche y requesón salieran en veloz carrera hasta el pesebre donde lo encontraron “envuelto en pañales y acostado en un pesebre” (Lucas 2,12) Que hermosa imagen del pesebre y que alegría observarla en este tiempo en tantos hogares que llenos de fe lo fabrican para rendirle un homenaje al Salvador. Ad0ornamos su llegada y festejamos su amor. Es más que una tradición. Es más que un simple fervor. Es algo que se metió muy adentro y sigue vivo para decirnos que su nacimiento, advenimiento es un regalo del amor de un Dios que lo dejó todo para salvarnos. En ese pesebre, aparte de los pastores, encontramos a: María: mujer bendecida y escogida por Dios. Llena del Espíritu Santo Dios la “encontró llena de gracia” (Lucas 1,30) para que sea llamada por siempre la “Bienaventurada” Ella y solamente ella es la Madre del Emmanuel “Dios con nosotros” La Madre de Jesucristo y Jesucristo es la tercer persona de la Santísima Trinidad. Por tanto, la Madre de Dios. A José: elegido para que acompañara y ayudara a la Virgen María en los quehaceres en el cuidado del niño que crecía en estatura, gracia y sabiduría delante de Dios y de los hombres. La mula, el buey, las ovejas: para señalarnos que hasta los animales se alegraron formando parte de aquella bendición que alcanzó a todos. También los astros, el cielo y las estrellas : para significar que toda la naturaleza se unía para celebrar y dejar constancia de lo que estaba sucediendo. Los Reyes Magos: unos sabios venidos de muy lejos para sorprenderse en medio de la luz y ver con claridad la grandeza del rey de reyes y señor de señores. Por eso le ofrecen incienso, oro y mirra de las manos generosa de Melchor, Gaspar y Baltasar. Aquella tierra de Belén había contemplado en su pequeñez la grandeza del Dios humanado. Cristo Jesús para completar la promesa descrita por Miqueas “ Mas tú, Belén Efratá, aunque eres la menor entre las familias de Judá, de ti me ha de salir aquel que ha de dominar en Israel, y cuyos orígenes son de antigüedad, desde los días de antaño… Se asentarán bien, porque entonces se hará él grande hasta los confines de la tierra” (Miqueas 5,1-3) Entonces pastores, estrellas, animales, luz, José y María contemplan la gran misericordia de Dios. Nosotros, a tantos años, conmemoramos – celebramos para abrir el corazón y recibir la gracia de ese amor que nacido de mujer nos da la vida. Una vida para… Amén.
Felicidades en un Dios que nos da la vida. |
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Dime que te cuento y te diré que aprendes Padre Marcelo Rivas Sánchez Derribando muros El pasado 9 de noviembre se celebró en la capital de Alemania los 20 años de la caída del muro de Berlín. Acción que realizó la presión popular ante la cúpula de la extinta República Democrática Alemana (RDA). Ciertamente que era un muro de la vergüenza que soportaron por 28 años. Muchos muertos, demasiados perseguidos y toda una ofensa a la libertad y a los derechos humanos. La Canciller Angela Merkel afirmó: “La libertad no nace por sí misma, hay que luchar por ella” Pero también agregó “hay que derribar todos los muros del siglo XXI” Es por eso, que hoy, en medio de este recuerdo que es una fiesta a la libertad, me invito y les invito a que vivamos en la libertad de los hijos de Dios. Un llamado a la unidad. “ ¡Jerusalén, Jerusalén, que matas a los profetas y apedreas a los que se te envían! ¡Cuántas veces he querido reunir a tus hijos como la gallina a sus pollitos bajo las alas, pero no han querido!” (Lucas 13,34) Aquella Alemania estaba dividida, separada por un muro de 155 Km. de largo y de los cuales 43 Km. Dividían en dos a Berlín de norte a sur, y otros 112 Km. Aislaban el enclave de Berlín Oeste del territorio de la República Democrática Alemana. Dios siempre ha querido y quiere que estemos unidos para que nadie, ni muchos menos la tiranía apague la luz de la libertad y de la sana convivencia. Entre nosotros muchos muros que esperan ser tumbados. Para ello se requiere la colaboración de todos y de todas. No es tarea de un día, ni mucho menos de un acto al cual esperamos que alguien en particular lo haga. Nada de eso. Es un acto que nos corresponde en unidad. Bien lo decía y lo repetía el Libertador “unidad, unidad, unidad o la tiranía nos devorará” Un llamado a la Reconciliación. “ El odio despierta contiendas, pero el amor cubre todas las faltas” ( Proverbios 10:12) Ayer dos pueblos separados y odiando a quienes los mantenían en esa situación. En esos 28 años se registraron miles de muertos al intentar escapar y muchos, demasiados fueron perseguidos. Aquel telón de acero trajo mucho odio, al cual Churchill lo llamó “el muro de la vergüenza” Es por ello, que nosotros, en esta Venezuela tan enfrentada y separada. Donde unos gobiernan y los otros deben callar y obedecer. De inmediato por amor a la familia, a los hijos y sabiendo que el futuro es hoy, debemos reconciliarnos y, de una vez por todas, no dejar que nada, ni nadie nos separe y enfrente. Yo que soy tachirense y conozco de cerca la situación de la frontera, siento mucha pena con todo lo que está pasando y de manera muy especial en ese llamado a la guerra que se hace como si eso no produjera mayor desgracia que la venta de pistolitas en los almacenes. Necesitamos cuanto antes perdonarnos. Esto será la válvula que hará escapar toda la presión que por estos años hemos acumulado. “Miren por ustedes mismos. Si tu hermano peca, repréndele; y si se arrepiente, perdónale. Si siete veces al día peca contra ti, y siete veces al día vuelve a ti diciendo: "Me arrepiento", perdónale” ( Lucas 17:3 -4) El perdón es un acto de amor y de entrega en el dejar el pasado y darle oportunidad a la vida y a la esperanza. Sin el perdón ninguna ciudad, menos Venezuela podrá progresar. El muro de los odios de todos los kilómetros del mundo y de la mayor altura debe derribarse para el bien de todos. Es inaplazable que lo hagamos. No hacerlo es encerrarnos en lo más negro de las cobardías. Que alegría haber recordado aquel 9 de noviembre de 1989 cuando el empuje y la unidad de las personas hacen derribar aquel muro que separaba. Aquellas 127 alarmas enmudecieron y se unieron al coro de los hombres y mujeres que en unidad y perdón decidieron ser libres y para siempre.
“Despertemos es el momento” |
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Dime que te cuento y te diré que aprendes Padre Marcelo Rivas Sánchez Llamados a la conversión
El Papa Benedicto XVI en su amor y dedicación a los pueblos ha convocado a un Concilio en África y desde allí los Obispos se han unido para reflexionar para gritar: “África no está a abandonada al fracaso. Nuestro destino esta todavía en nuestras manos. África levántate…” Mensaje final del II Sínodo que en la visión de Benedicto XVI se es necesario defender las causas de los pueblos. Si, para la Iglesia todos son importantes, entonces todos debíamos mirar con ojos de amor a los más pobres. Bien lo vivió y lo dijo San Juan de la Cruz “al final de nuestros días seremos juzgados en el amor” Pero no, del amor en lo que damos a los otros, sino del amor con el que utilizamos para reservarnos las cosas para nosotros mismos. En el Sínodo se hizo una radiografía del continente, por lo general muy dolorosa, descarnada y muy real. Tan real que nos invita, de forma inmediata, a verla con ojos de reconciliación, justicia y paz. Allí están los refugiados, la pobreza que crece y escandaliza, el hambre, la guerra y los conflictos. Todo porque se ha perdido la conciencia de pertenencia a la verdad y a la vida. Por eso la voz de los obispos resuenan con mucha fuerza: “traten a África con respeto y dignidad” Ante esto el Papa Benedicto XVI insiste y recalca para que “se haga necesario un cambio en relación con el peso de la deuda de las naciones pobres que literalmente está matando a los niños. Las multinacionales deben parar la devastación criminal del ambiente y la explotación insaciable de los recursos naturales. Es una táctica de corto visión fomentar guerras para lucrarse rápidamente gracias al desorden provocado, que cuesta vidas y sangre humano” Por tanto, es una nación que se niega a morir. De ahí lo importante de la conversión para romper el círculo vicioso de la ofensa, la venganza y la retaliación, para que aparezca el anhelado perdón. Es un momento de mucha gracia para el África, pero también para todos, pues la conversión es una realidad que todos necesitamos e incluso, nos haría de mucho bien para estos momentos que estamos viviendo. Pues, uno de sus temas es el respeto y el reconocimiento de la mujer muy unido a la formación de los laicos para tener personas inspiradas en le bien común dentro de la doctrina social de la Iglesia. En esa conversión se reconocen los valores autóctonos, el aporte de los misioneros y sobre todo una llamada al diálogo. Todos, sin excepción, estamos llamados a un cambio de conducta. Especialmente delante de la sexualidad. No es posible que se incremente el machismo deliberadamente donde las que pierden son las mujeres y sufren los hijos. Donde el Sida y enfermedades de transmisión sexual se quieran combatir con el simple uso de un preservativo y deja a un lado al educación sexual de forma seria y positiva. No podemos olvidar la abstinencia, entre quienes no son casados y la fidelidad entre los casados, programas que han dado alto rendimiento a favor de la salud. Desde África resonaron los tambores, no para la guerra, sino para la toma de conciencia delante de una verdad: “el mundo necesita amor” “La Familia necesita paz” y “todo el país necesita perdón” |
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Dime que te cuento y te diré que aprendes Padre Marcelo Rivas Sánchez El dar produce mucha alegría. Nos encontramos en un país de limosnas, es decir, nos conformamos con algo para salir del paso, pero nos olvidamos de la necesidad de la estabilidad, de la dignidad y del derecho de toda persona a vivir con decencia. Este título se encuentra en los Hechos de los Apóstoles 20,35 “Hay mayor felicidad en dar que recibir” Este dar es un mandato de Dios y una necesidad de la humanidad para que de esta manera dejemos a un lado la ambición, la codicia y el egoísmo que tanto hace daño a todos. Cuando una persona se cierra ante sus riquezas y empieza a repartir limosnas como si estuviera haciendo el mejor favor y no es así. Pues cuando no damos con dignidad estamos quitando de forma egoísta lo que le corresponde a los demás. Es muy lamentable la situación de abandono y pobreza en que están nuestras comunidades. Muchos indigentes, demasiados niños de la calle, aumento de hogares que no progresan y no es buena noticia decir que el 20% de la humanidad está viviendo en la extrema pobreza y por tanto sufren hambre. Y con mayor dolor tener que decir que diariamente mueren de desnutrición más 35.000 niños y el total de muertos anualmente por causa del hambre es de más de 40 millones de personas y otras 100 millones de personas sufren discapacidades como consecuencia de la desnutrición, 20 millones que necesitan sillas de ruedas no dispone de ellas. Esto nos grita y explota en la cara como cohete de la más pura verdad y si miramos a nuestro estado Sucre tendremos que aceptar, que a pesar de los muchos recursos económicos con los que cuenta el estado Sucre, el estado se encuentra en una situación socio – económica crítica. Situación que se refleja en casi todos los sectores. Tenemos índices de pobreza y marginalidad muy elevados, el índice de criminalidad e inseguridad que cada día es mayor, al igual que la tasa de desempleo ha llegado a grandes escalas. Demasiadas invasiones donde las personas se encuentran en situaciones de marginalidad y pobreza, sin los recursos necesarios para cubrir las necesidades básicas como lo son la comida y la ropa, mucho menos para que sus hijos accedan a la educación. Entre, ellos, sin quererles faltar el respeto, se desarrollan antivalores para sobrevivir. Sin olvidar la situación de desmejoramiento en que se encuentran calles, parques y más triste los pueblos con sus vías completamente destruidas. Entonces, hay que dar con alegría para sentir mayor alegría. Todo debe comenzar por los que el pueblo eligió como sus representantes. En segundo lugar, por la empresa privada y en tercer lugar por los que habitan en este estado. Nos falta dar más con calidad, honradez, y ser más solidaros frente a esta dramática situación. Todos, en unidad de esfuerzo, debemos salir. Unos con la oración confiada a Dios para que nos de sabiduría a la hora de actuar. Otros entregando el diezmo del verdadero amor al prójimo. Pero en definitiva quien más tiene dando más y el que menos tiene tratando de hacer el mejor esfuerzo en una sana economía familiar. Pues no estamos aquí para hacernos ricos y sufrir mañana la triste noticia que en la urna nada nos llevaremos. Recordando a lo que Cristo nos invita de cuidarnos de toda codicia (Lucas 12, 13-21 “esta misma noche te reclamarán el alma” Sintamos que esa alegría está cerca de cada uno y si no la sentimos es porque nos alejamos de Dios en la fracción del pan que debe alcanzar para todos. Y sentir que es verdad y nunca saldremos mal parados: “que Dios ama al que da con corazón alegre” (2da Corintios 9,7) Aprovecho la ocasión para invitarles a unirse a nuestra Fundación Casa Hogar Divino Niño Jesús que atiende a niños y niñas en situaciones difíciles y que están esperando por ti en la Parroquia Santa Ana de Caigüire. “Que la sonrisa de un niño dependa de ti y de todos” 2009 10 19 |
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Dime que te cuento y te diré que aprendes Padre Marcelo Rivas Sánchez
El Santo Rosario: corona de rosas para Cristo salvador y María orante y obediente. Su nacimiento es la mejor forma y la más bella manera de encontrarnos con Cristo desde que al pie de la Cruz entregó a la Virgen María como instrumento de amor a la naciente Iglesia. Por eso, Santo Domingo de Guzmán (finales siglo XII) desde la oración diaria del sacerdote a través de los salmos (150) logra enlazar textos bíblicos en la vida y acción de Cristo con oraciones de alabanza a Dios en la escogencia de María la Virgen como la Madre y Señora “Ave María” “Padrenuestro” y el “Gloria” Esa oración, que es uno de los mejores regalos de la historia de una Iglesia del espíritu y de la meditación, donde lo importante no es alabar a la Virgen María, sino darle gracias a Jesucristo. Es decir, el santo rosario se centra en Cristo Jesús como un reconocimiento a su obra salvadora, de ahí que todos sus misterios, a lo largo de su contemplación y desarrollo, apoyado en textos bíblicos donde la participación de la Virgen es sublime y “llena de gracia” como la llamó el Ángel Gabriel. Entonces, el rezo del Santo Rosario no consiste tanto en repetir avemarías a diestra y siniestra, sino meditar bíblicamente los misterios del amor de Cristo por salvar a la humanidad. Por eso desde la batalla naval de Lepanto (1571) cuando el avance de los musulmanes hace que el Papa Pío V invitará a todos a rezar el santo rosario y desde ese momento la Virgen del Rosario (7 de octubre) se incorpora a la fe de los pueblos hasta el punto que acompañara a todos en su caminar diario, bien definido por el Papa Juan Pablo II que nos invitaría a colocar en el santo rosario las angustias y alegría de todos. Es el Rosario el armamento del católico que reúne a la familia para contemplar a Jesucristo y al hacerlo se mira a sí mismo para lograr comunicarse y renovarse con amor lleno de gracia en la Santísima Virgen María. Ejemplo de esto lo encontramos en la Virgen de Coromoto, quien a la puerta de la choza del indígena sentada en un taburete espera a la familia para catequizarla y darle la alegría de conocer el amor de Dios. El rosario no es una pérdida de tiempo, todo lo contrario, es un encuentro en el amor de Dios reflejado en una mujer que supo aceptar, vivir y compartir el secreto de la salvación. Tampoco es la repetición de unas cuantas avemarías en forma rápida y sin sentido, sino que es una seria invitación a meditar los misterios de Cristo, en compañía de la Virgen María. Es, por tanto, un esfuerzo dedicado que contempla el hacer de Cristo en beneficio de la humanidad y que la Virgen supo apreciar y vivir de ahí que sea coronada de gracia y bendición e incluso llevada en cuerpo y alma al cielo. No hay que olvidar que el rosario acompaña a la humanidad y a su vez, coloca toda su fe en su acción. Recordemos aquella peste llamada “la muerte negra” que arropó a Europa y fue superada con el rezo del santo rosario de manos de los dominicos del año 1349. Su rezo es una fuente de bendiciones y gracias. Particularmente en mí se hace realidad el sacerdocio gracias al rezo del rosario por parte de mi madre (Edilia) quien pedía a Dios, en la Virgen María, un hijo sacerdote. Desde ella aprendía a rezarlo y a vivirlo con amor y devoción. Por eso Dios me ha regalado al gracia de estar hoy como párroco de la Madre de la Santísima Virgen María (Santa Ana) Nos quiere nuestra salvación y felicidad, por eso desde la Virgen María no la procura y nos invita a contemplar el santo rosario en sus misterios traemos a nuestra vida los misterios de la vida de Jesús y de esa conducta admirable de María: Unos de gozo; otros de dolor; de luz y de gloria. Para ir pasando por escenas evangélicas llena de riqueza y de amor: Belén, Nazaret, Jerusalén, el huerto de los olivos, el calvario, María al pie de la cruz, Cristo resucitado, el cielo… Y todo para ir creando un ambiente de oración meditación y encuentro con lo que nos da vida en Cristo Jesús. Ojala, con todo el cariño de católicos, comencemos a recitar en forma orante el rosario y si alguno no lo conoce, debe dirigirse a cualquier templo parroquial y pedir información y allí aprenderá con mucho amor a recitar esta alabanza a Cristo salvador y a la Virgen orante y obediente. (Como un aporte a octubre, mes dedicado a rezar el santo rosario)
2009 10 08
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Dime que te cuento y te diré que aprendes Padre Marcelo Rivas Sánchez Jamás podrá haber libertad sin la verdad. Los tiempos no es que cambien, sino los protagonistas son otros que van haciendo la historia. Hoy estamos tejiendo una historia que avanza con mucha rapidez y esa rapidez, desde la voz del Papa Benedicto XVI nos dice con firmeza desde Checoslovaquia “No hay libertad sin verdad” Esto ya dicho y repetido por Juan Pablo II quien estando en América supo afirmar: “Si quieres la paz, trabaja por la justicia. Si quieres la justicia defiende la vida. Si quieres la vida, abraza la verdad, la verdad revelada por Dios” Venezuela se agita y se despereza. Es un movimiento positivo juvenil que como enjambre alza sus manos blancas a favor de un reclamo pacífico para pedirle al gobierno dejar entrar a la Comisión internacional de los Derechos Humanos y desde Venezuela constate la situación de la persecución contra la disidencia y conozca a muchos presos políticos que están encarcelados sin haber hecho daño alguno. Esta es la verdad de un grupo de jóvenes estudiantes que nos dan una lección de lucha y sacrificio. Es una lección de madurez civil, participativa y con apego a los derechos ciudadanos. Este esfuerzo, de seguro, traerá muchas dificultades al gobierno, pues la fuerza, la persecución junto a una policía y guardia no han podido detener, como tampoco la cárcel, pues el estudiante Julio César Rivas al salir de la prisión se incorporó a la huelga de hambre. Esta acción tiene mucha garra que nos está enseñando valores que habíamos abandonado por miedo, por un plato de lentejas e incluso nos había silenciado delante de un conformismo e indiferencia que nos comía por dentro. Dios sacó a su pueblo Israel de la esclavitud de Egipto y los invitó a caminar por el desierto y todo porque Dios en su amor quiere siempre la libertad en esa firmeza que llena los corazones de esperanza. Una esperanza que es suave brisa en las acciones de jóvenes en la búsqueda de la libertad. Una libertad que inspira a una verdadera revolución que hace que todos seamos liberados de la mentira y de la injusticia. Aunque la huelga de hambre sea un extremo porque se coloca la vida en peligro y ante los ojos de Dios la vida es sagrada y nadie tiene derecho a ponerla en peligro. Aún así, se tiene que hacer algo y ese “algo” tiene que ser detenido por el gobierno, porque si llega morir un joven de inmediato se desarrollará un movimiento de dimensiones sin precedentes en la historia de la Venezuela de estos días. Entonces, es muy peligroso engañar a los que protestan porque cada día crece la rabia y la unidad. Entonces, “quien no la debe no la teme” y si han gritado, por todas partes, que Venezuela es de todos y esta revolución llegó para quedarse. Dejen que venga la comisión internacional y que constate que los huelguistas son unos mentirosos y forma problemas que están buscando crear desestabilizad y ahí sí, métalos presos a todos, incluso a mí por estar defendiendo a estos muchachos. La verdad será la verdad y nadie la podrá ocultar, por eso, el reclamo juvenil se centra en esa Declaración Universal de los Derechos Humanos desde la Naciones Unidas donde en 30 artículos podemos recordar lo siguiente: Artículo 1. “ Todos los seres humanos nacen libres e iguales en dignidad y derechos y, dotados como están de razón y conciencia, deben comportarse fraternalmente los unos con los otros” Pero al observar a una Venezuela separada, donde unos tienen derechos (los rojos) y otros no. Debemos decir: aquí no hay libertad. Artículo 3. “ Todo individuo tiene derecho a la vida, a la libertad y a la seguridad de su persona. Pero aquí la vida no vale nada frente a la delincuencia que haces de las suyas y no hay controles. Artículo 5. “Nadie será sometido a torturas ni a penas o tratos crueles, inhumanos o degradantes” Y cuando a un estudiante o un servidor social de una alcaldía le meten en una cárcel junto a delincuentes uno se pregunta: ¿Dónde está la justicia? Artículo 9. “Nadie podrá ser arbitrariamente detenido, preso ni desterrado” Y toda la gente que se ha marchado de Venezuela por la persecución, por la violencia, por pensar diferente. Y los detenidos como presos políticos y tantos jóvenes criminalizados. Esa verdad no necesita anteojos y mucho menos cristales de aumento. Es la verdad y esa verdad nos quiere dar la libertad. De esa libertad es el camino que recorren los jóvenes y lo están haciendo con dignidad y en plena conciencia de una Venezuela que les sabrá agradecer tan noble acción. mrivassnchez@gmail.com |
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Dime que te cuento y te diré que aprendes Padre Marcelo Rivas Sánchez
Aplaudiendo la libertad ganada con el esfuerzo de todos.
Por todos lados se observan intentos para someternos. Incluso desde la asamblea en minúscula se hacen leyes “a diestra y siniestra” para detener la disidencia y encerrar a la libertad. Todo esto en vez de alejarnos o meternos miedo nos da más alas para unirnos y buscar salidas democráticas. Desde antes sabemos todo lo que se ha hecho para dominar. En tiempos de los primeros cristianos a la entrada de Roma colocaron a los crucificados para que los demás escarmentaran; el marxismo buscó hacer que pensáramos que el cielo estaba en la tierra y no lo logró. De esto levantaron un muro para separar y vivir en un paraíso comunista. Pero eso, también se cayó. Aquí, sin ir tan lejos, nos han separado y dividido. Entre ellos “os mejores venezolanos” y los otros los que no piensan como ellos. Hoy en día, necesitamos, más que destruir, más que separar. Necesitamos construir. Como bien lo repetía Juan Pablo II “Construyamos puentes, no muros de separación” Todos, debemos, para siempre, fijar la mejor idea, que resulta de todo este maltrato gubernamental, que no es otra que la unidad de acción. No para ir contra ellos. No, nada de eso, es para evitar el crecimiento de la brecha que nos está separando vertiginosamente. Separación que está produciendo resultados muy diabólicos para hacernos repetir: “ese no es mi problema” “A mí no me han tocado” “Yo tengo un familiar en tal puesto” Donde lo malo y más serio se centra en pensar que el bien no es bien si lo hace otro. Por eso no se reconoce el error si la actuación es mía. Delante de la confiscación y exigencias politiqueras no podemos quedarnos con la simple observación y pensar que lo que sucede no influye en los demás. Si influye y traerá consecuencias muy tristes. No pretendo ser un pesimista y un crítico que ataca todo lo que aparece, todo lo contrario, quiero alertar para que, sin crear temores, despertar conciencia para no caer en la pasividad, donde el simple mirar sea una manera de buscar lo propio y lo de los demás no me interesa. Nuestro Señor Jesucristo no vino a juzgar sino a ayudar. Y así también los cristianos. Es muy importante no mirar a los demás como enemigos, mucho menos como si fueran otros venezolanos. La máxima más justa nos debe hacer decir “si no es mi enemigo es mi amigo” La doctrina más sana del cristianismo es querer a todos y Jesús, en aquel momento antes de la pasión hace un llamado a que sean uno. Llamado que hoy se actualiza, sin olvidar a nadie, mucho menos a quienes han perdido la libertad por pensar diferente e infundir miedo dentro de un ambiente triste donde quien gobierna tiene el poder y lo usa muy mal. Necesitamos amor y del bueno, pues el interés de cada uno no puede ser el simple acto de arrimar sardina para su plato mientras los demás se mueran de hambre. De ahí que ese amor es, sin duda, el mejor ingrediente para cocinar el mejor menú donde todos participan y todos comen. Ese comer significa unidad sin excluir a nadie. Toda esta situación nos debe llevar a una lucha pacífica pero contundente. Una lucha al mejor estilo juvenil de nuestros queridos estudiantes, que sin egoísmo y rencores dejan de consumir alimentos para hacer un llamado “muy serio” a todos y enfrentar con seriedad para lograr un cambio. No hay mayor pobreza donde el rancho mental se clava en la vida para quedarse con los brazos cruzados y dejar pasar las horas como meros observantes para convertirse en cómplices de situaciones contra la dignidad de las personas. Es el momento de ganar la añorada libertad con las únicas y verdaderas armas, “la vida” que se ofrece por el bien de todos y la grandeza de un país. Entonces, más que aplaudir, hay que apoyar y con todo el corazón para que mañana no lamentemos, delante de nuestros hijos, el no haber hecho nada por el bien de todos. 2009 09 28 |
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Dime que te cuento y te diré que aprendes Padre Marcelo Rivas Sánchez Hoy más que nunca hay que gritar y sin miedo. Una cosa era cierta, entre más me lo prohíban, cómo que uno lo quiere hacer. Somos muchos los que nos ha tocado recorrer caminos oscuros por esa bendita prohibición sin haber existido un sano diálogo y un acompañamiento cierto. Aprovechando estos momentos de tanta euforia por tratados, convenios, leyes y ordenamientos gubernamentales para hacernos sentir, junto a la Palabra de Dios, que es fuerte su mandato, pues es Dios quien nos dice que gritemos sin miedo, con fuerza y sin miedo. En cada cristiano está la maravilla de poder levantar nuestras voces como trompetas y así denunciar las maldades en las cuales hemos caído. Es una verdad que nos duele, pero por encima está una verdad que nos ayudará a tomar conciencia. Este grito va dirigido a no dejarnos quitar la dignidad o mejor, a no venderla, ni mucho menos entregarla por unos corotos, por un sueldo o por unos cuantas lentejas del baratillo del ofrecimiento de los de arriba. Entonces, hay que juntarnos para sentirnos más fuertes y poder avanzar. De no hacerlo caeremos en lo diabólico “dividir para vencer” y tendremos como resultado una entrega fácil y que la lloraremos eternamente. Digamos, no por decir, sino con todo el sentimiento del caminante que camina sin parar, pero sin prisa “esta tierra merece lo mejor” Ese hacer requiere de una profunda conciencia de que todos somos importantes. Importantes para todo y no para algunas cosas. Para todo y hay que decirlo mirándonos a la cara. Si lo vamos a hacer es por todos y en unidad de todos. Si lo vamos a realizar es para el bien de tu familia y de la mía. Al hacerlo, de seguro, habrá menos esclavos y más gente feliz. Por estos días leía uno de los correos que me decía: El arte de callar Cuando en la oscuridad de la noche buscamos a Dios, y no lo encontramos es porque no buscamos en nuestros corazones. Recuerda que él jamás abandona a sus hijos... Y creo, con todo respeto, que nosotros hemos caído en un silencio muy cómplice y acomodaticio para no desmoronar en problemas y el tiempo nos ha estado comiendo y por eso, es que ahora, se nos hace cuesta arriba. Por eso, es el momento y no habrá otro. No tanto de gritar por gritar, sino gritar en unidad para detener y encausar lo que Dios quiere para todos. Gritar con fuerza y sin miedo. No a la esclavitud, no y no a la separación de venezolanos y mucho menos a una escalada armamentista donde la guerra toma dimensiones grotescas y a la vez burlonas. Nos enfrentamos por un color politiquero, pero seguimos viviendo en el mismo barrio, con la misma familia y con la misma gente. Al país, que supuestamente nos va a invadir, le vendemos la mayor producción de petróleo. Ofrecemos unos patrulleros para que “defiendan las escuelas” y las escuelas siguen el curso porque el lema de ellas son los niños y sus educadores. Vuelve a insistir Dios, para ahora, gritarnos: “Dónde está tu hermano” Palabra dirigida a Caín que había matado a su hermano Abel. Caín con un cinismo, le contesta “Que se yo” ¿Acaso soy yo el custodio de mi hermano? Por eso, este grito sin miedo va más allá de un llamado, es una necesidad. Ya que hemos perdido el corazón, endurecida nuestra caridad y cerrada la mente para no dejar entrar al otro, que es mi hermano y de sangre. Llorar después no tendría el efecto que nos enseña Santa Mónica delante de las travesuras de su hijo Agustín. Nos resulta muy duro, pero hay que decirlo. Lloramos a los hijos después que la muerte, que les venía persiguiendo y todos lo conocían. La consigna es estar unidos, pues todos tenemos algo que entregarnos mutuamente. Es la hora de hacer, de corregir y de no lamentarnos tanto después que la desgracia nos ha tragado.
“Si Dios nos pide que gritemos sin miedo será por algo y ese algo es cambiar, de una vez, el corazón que se ha llenado de tristeza y división” 2009 09 22 |
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Dime que te cuento y te diré que aprendes Padre Marcelo Rivas Sánchez Por la Escuela todo La escuela siempre será la escuela. Pues nadie, por muy mala memoria que tenga, deja a un lado los bellos recuerdos de aquella infancia que se desarrolló en tiempos de escuela. Ayer se dio inicio a las clases, al período escolar 2009 – 2010 donde “muchos” apostaron a una guerra y a una confrontación, pero se olvidaron que la escuela es una unidad entre los maestros, los padres y los niños. Que esa unidad no es tan simple de dividir y mucho menos meterle ideología contraria la formación y la verdad. Una formación centrada en llevar al niño a la superación y una verdad centrada en la vocación de cada uno de los maestros, que en definitiva, son los que marcarán la pauta en la enseñanza y el camino de los niños. Aclaremos…
Entonces, la escuela debe ser el centro de toda comunidad. Si una comunidad estuviera agradecida de la escuela donde los grandes fueron los primeros en estudiar ya ahora sus hijos y mañana los hijos de sus hijos. De seguro, la situación fuera otra y estaría funcionando responsablemente la comunidad educativa abierta a los padres y representantes y no se estuviera pensando en unos grupos politizados que en nada muestran interés por la escuela, por los maestros y mucho menos pro los niños. Me refiero a los desprestigiados consejos comunales, que en nada pintan a la hora de hacer sentir un servicio comunitario. Lo que debemos estar pensando para estos momentos es volver la mirada a la escuela como lugar de aprendizaje, de la prolongación del hogar y del lugar mejor y más exacto para el encuentro en la fraternidad y el crecimiento personal. Por eso cerrarles las puertas a lo religioso en los centros de enseñanza es como quitar lo bello y mágico de la navidad por aquello de que San Nicolás viene del imperio. Pienso que esto es una total tontería y una forma de querer desplazar a la Iglesia y eso será imposible. La vocación del seglar cristiano tiene una urgente tarea en el campo de la acción y la vida política: abrirla a la ética del servicio, a las experiencias de gratuidad, libertad solidaria y subsidiaria y, sobre todo, de comunión. Por eso nadie puede quedarse con los brazos cruzados y sin hacer violencia debemos reclamar nuestros derechos y la religión es un derecho natural a las personas. Por favor, señores del gobierno no se contradigan. Si se dicen bolivarianos y aman entrañablemente a Simón Bolívar. ¿Por qué despreciar la religión? Si Bolívar iba a misa y alentaba a la formación cristiana, además, el acta de declaración de la independencia empieza: en el nombre de Dios Todopoderoso. Entonces, ¿cómo es eso que en la escuela no se puede dar formación cristiana? Querer olvidar la misión de la Iglesia, es buscar pleitos que son anotaciones contrarias a la pizarra que ya no le caben los errores. 2009 0916 |
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Dime que te cuento y te diré que aprendes Padre Marcelo Rivas Sánchez UNO SE CANSA Es una expresión muy oriental, muy cumanesa que la escuchamos a diario y que hoy en día es repetida por muchos delante de lo que sucede en nuestro país. Apelo a esta frase para llamar a todos, al mejor estilo de Gandhi para invitarlos a que “nos convirtamos en el cambio que buscamos en el mundo” Esto es, que para cambiar a muchos hay que cambiar uno mismo. Si yo, Marcelo no soy capaz de hacer cambiara los que están cerca de mí, jamás podré cambiar a nadie. Nosotros precisamos, para vivir tranquilamente, tener, por lo menos, la sensación de seguridad y confianza en las personas que dirigen los asuntos de estado, de gobierno. Necesitamos confiar en las autoridades. Ya son demasiadas las expresiones de insulto, rabia, descalificación y toda una acción de desconocimiento del otro por pensar diferente. En la última acción de caminata y protesta en el Táchira se observó, según video, que los que estaban arriba del edificio lanzaban huevos a los manifestantes. Esto implica que estaban preparados y querían crear violencia. Entonces, una cosa es hablar de paz y otra atacar con procedimientos ya preparados y dispuestos para confrontar y no aceptar a los otros. Además, los hechos violentos contra los periodistas del bloque Carriles donde fueron golpeados salvajemente son ahora los culpables, mientras que los acusados son puestos en libertad para ser juzgados más tarde. Estos nos habla de la injusticia contra ese dirigente caraqueño Richard Blanco, quien si está preso y deberá pagar aunque sea inocente. La pregunta clave siempre es: ¿Qué es lo mejor que puedo hacer es estas circunstancias? Todos sabemos, que la violencia engendra violencia y que en la guerra perdemos todos. Aunque, yo mismo, esté indignado, tenemos que seguir reclamando, escribiendo, hablando y dando presencia en forma libre y cívica en las calles. No es pecado reclamar. Jamás ha sido causa de encarcelamiento el que una persona se vea obligada a buscar soluciones a sus problemas. Todos tenemos grandezas. Todos necesitamos despertar para exigir que se cumpla con lo mínimo en el esfuerzo de gobernar a un país. No es posible que se esté criminalizando toda acción y se confunda acción vecinal con guarimbas que en nada tienen que ver con eso de que “Uno se cansa” y ya estamos al borde de un explotar. No tanto por simple cansancio, sino porque los golpes enseñan, pero el caradurismo maltrata y despierta pasiones indetenibles. No es posible que el gobierno esté pensando que por saber utilizar el martillo sienta que todos somos tachuelas para darle y darle. Uno se cansa y se inicia una reflexión a la inversa. Es aquí donde la situación se torna escabrosa y de respuestas que nadie conoce. Es el momento para hacer una oración sincera para tomar aire: “Dios, concédeme serenidad para aceptar las cosas que no puedo cambiar, valor para cambiar aquellas que puedo y sabiduría para reconocer la diferencia” es una oración para no caer en la diatriba, que es el arma que se utiliza para atacar todas las opiniones que se hacen para decir que ya está bueno. Por lo general nosotros tendemos a reaccionar emotivamente con una dura crítica, una quejadera diaria, comparando con el pasado, compitiendo para ver quien puja más y cayendo en el peligro de un enfrentamiento. Esto es el resultado de una falta de equilibrio en el abuso que sentimos todos los días por parte del gobierno. Para vivir una polarización, una división tan fuerte que hace imposible que encontremos una solución que nos hermane y nos ponga de acuerdo. Esto es, sencillamente, lo que nos cansa y a la vez se convierte en detonante muy peligroso. Por eso, es el momento de actuar y reaccionar en forma cívica y apegada a la Constitución, aunque ellos no la cumplan. Es el momento de gritar: “Vivo por la vida… ¿Y tú?” Lema que Colombia sentirá y motivará del 6 al 13 de septiembre dentro del Programa de la Pastoral Social de la Iglesia. Postura que en nada nos hace cruzarnos de brazos y relegarnos a unos simples marchistas que pateamos calles y terminamos más frustrados que nunca. Es el momento de unirnos y en acciones cívicas hacernos sentir y así todos, sin caer en la violencia podamos analizar el problema, proponer alternativas para recomendar soluciones, dar pasos para alcanzar esa solución, donde todos participen y salga a la luz la verdad y la causa de que nuestra lucha se justifica. Pues somos muchos que hablamos, escribimos y a la hora de la hora no hacemos nada. Siempre en la playa, siempre cansados, siempre alejados. No basta la intención. Hay que unirse al grupo para sentir que el esfuerzo de cada uno es la mejor oferta para el camino de soluciones. No hay que esperar que aparezca una persona para que nos diga lo que tenemos que hacer. Unámonos y hagamos que en el esfuerzo comunitario esa persona aparezca y canalice nuestras preocupaciones. El no hacer es la causa de haber permitido todo esto. No hay mejor dicha que la que se encuentra por el camino. Pues auque las distancias sean muy largas se acortarán con el primer paso que se da. Dejar para mañana lo que se puede hacer hoy es el peor de los errores. Sin olvidar que las sombras crecen más al amparo de la oscuridad y el silencio. Vale la pena el esfuerzo dentro de una sana convivencia. Pero nadie nos podrá quitar el derecho a reclamar, disentir e incluso de pedirle respuestas de sus malas o equivocadas acciones a quienes están detectando el gobierno 2009 08 31 |
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Dime que te cuento y te diré que aprendes Padre Marcelo Rivas Sánchez Todos a la espera de la mejor noticia. Todos, de alguna manera, queremos para Venezuela, la mejor noticia, que la prosperidad, paz y el reencuentro llegue para avanzar en el progreso para el bien de todos. Pero cada vez que la oposición, llámese a una gran parte de venezolanos, quiere expresarse siempre hay una respuesta negativa marcada por la violencia y entonces, todo se diluye y lo avanzado se pierde. Para nosotros y para quien escribe, Buena Noticia se escribe con mayúsculas, pues, aunque Cristo no haya escrito nada, en cada uno de los evangelios está su vida y sus principios dando testimonio del amor de Dios para con su pueblo. Entonces, Buena Noticia, es la grandeza del vencer la muerte con la Resurrección y darle a sus apóstoles esa fuerza para anunciar la alegría de la vida. Ese mensaje es sencillo pero contundente donde ese reino está en medio de nosotros y hay que vivirlo en la paz, la justicia y por el amor. Esa Buena Noticia lleva, en todo su esplendor, donde la mayor alegría es que Cristo resucitado está en medio de nosotros. Venezuela espera y siente que la Noticia debe llegar a todos. Una noticia que nos una y logre que en medio de las diferencias, nos podamos entender y comprender. La mejor Noticia debe comenzar con una sana participación en libertad donde las ansias de justicia no sea criminalizada, ni mucho menos politizada. Dónde todos puedan sentirse con capacidad de reclamar sin dañar a nadie, sin aprovecharse de los más débiles para crear matrices de opinión contrarias. Esa Buena Noticia no puede caer en una asamblea de un solo color que adiestra y siniestra alza manos para aprobar sin previo estudio; No debe jamás aplicar la fuerza donde el puño se cierra para atrapar palos y piedras y maltratar a los que son contrarios; nunca más aprovechar comandar un pelotón para criminalizar y hacer política dejando a un lado el honor que será su ceniza; nunca pero nunca insultar, agredir a los contrarios con impuestos, impositivos dentro de un plan donde lo que vale es lo que yo pienso y el resto que se lo cale. Venezuela no resiste más tan seguidas malas noticias. Ellas están destrozando la familia, la juventud, la sociedad entera. Y lo que es peor la gente, la gran mayoría como si nada. Todo por un miedo a la participación y una indiferencia, pues se tiene la idea que la política es mala y nos quedamos en la simple crítica que es un mal de las constantes malas noticias. Anunciemos lo mejor para nuestra patria. Demos lo mejor para que podamos sacar los excelente. Pero si lo sembramos y lo regamos con el veneno del enfrentamiento defendiendo a personas y permitiendo desmanes, de seguro, recogeremos las tempestades donde todos nos destruiremos. Bien lo decía Pío XII “Con la paz ganamos todos. Con la guerra perdemos todos” Es la hora de hacer un estudio, en serio, de nuestra actitud y nuestra postura delante de las malas noticias. Es el momento para que dejemos a un lado tanta discusión inútil y nos pongamos a servir al bien común. Bien común que es patrimonio y responsabilidad de todos. Bien común que nos explotará en la cara delante de nuestros hijos y familiares cuando nos pregunten ¿Por qué? ¿Por qué? Dios nos invita a lo mejor. Dios nos llama a construir no a destruir. Es el momento. Hay que despertar y reaccionar. Aquí nos e aceptan excusas o silencios de complicidad. Aquí debemos, todos, luchar por la mejor noticia donde cabemos todos y todos tengamos responsabilidad.
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Dime que te cuento y te diré que aprendes Padre Marcelo Rivas Sánchez Los niños son de todos “La moral sin la religión carece de su fundamento” (Simón Bolívar) No hay nada más maravilloso que reunirse con niños y dejarlos actuar para que cada uno tenga lo mejor de ellos en una placentera experiencia. A un niño le preguntó la maestra. ¿Qué es el amor? y el niño respondió: ayer acompañé a llorar a un viejito que le dolía mucho la espalda. Por eso ante el papel que lo convirtieron en ley de educación los niños tienen que hablar, pero no como soldaditos de la revolución al mejor estilo de los pioneritos cubanos, para afirmar de entrada que ellos son personas y por tal piensan y saben mucho, por lo menos mis sobrinos que me dejan con la boca abierta. El futuro dependerá de lo que hagamos ahora, y ciertamente, hay mucho que hacer. Ese hacer es hoy. Cabe, entonces aquí, recordar el sueño que tenía Martin Luther King: “Soñar a mis hijos grandes, sanos, felices, volando con sus alas sin olvidar nunca el nido” Que triste es ver como hoy nos quieren dividir e incluso sacar a Dios de las escuelas para que haya campo para otras cosas. Es vaciar el morral de cada niño y meterle junto al lápiz y el cuaderno el color de la política, de la negación a la verdad y descargarla en unos consejos comunales que niegan la participación y cumplen disposiciones estrictamente del orden partidista. Si esto es mentira echemos un vistazo a la comunidad de Caigüire en el silencio de unas consejos comunales que nadan dicen de la inseguridad y el abandono. Se hace necesario que actuemos y en ese hacer está principalmente criar a los hijos no tanto en lo que les guste, sino en lo que les enseñe, por eso una mala madre o un mal padre es el que visita a sus hijos por la noche y los bendice; les pregunta por la tarea y los obliga a ser responsables; los que le levantan por la mañana a bañarse; saben quienes son los amigos o amigas… Debo, con mucho sentimiento relatar lo que experimentó el rey Pelé delante de la verdad de su hijo. Pelé apareció en la televisión con lágrimas en los ojos para reconocer la falta de su hijo Edson de 35 años, quien debe responder por la asociación delictiva con narcotraficantes y puede ser condenado a 15 años. Además agregó: como cualquier padre, es triste ver a tu hijo metido en grupos como ése y ser arrestado, pero él tendrá que sufrir las consecuencias. Reconoció, desafortunadamente, yo quizás estaba demasiado ocupado y no me di cuenta. Es lamentable, porque yo siempre he peleado contra las drogas y no noté lo que pasaba en mi propia casa. A los niños hay que tratarlos no encadenarlos; hacerles un camino que tenga espinas y rosas para que ellos encuentren las rosas y sepan que las espinas hacen daño. De no tratarlos con dignidad será nuestros propios verdugos, monstruos, prepotentes que sufrirán y harán sufrir a los demás. Dejar que sean personas no es comprarles las conciencias con el dinero o encaminarlos por un sendero revolucionario donde los grandes ni hacen lo que dicen, ni dicen lo que deben hacer. Pues ser persona es respetarles su futuro donde Dios los abrazó al entrar al mundo y de seguro, los guiará hasta la patria definitiva. Vale la pena, entonces, volver a la escuela y desde ella repetir una y cien veces más, lo que dijo el Cardenal Urosa: “No saquen a Dios de las escuelas, pues la Enseñanza Religiosa en las Escuelas, un inmenso bien y un derecho adquirido” Ojalá, todos, especialmente los padres de familia, despierten y salgan en defensa de sus hijos, de los niños para que siendo personas se les respete el derecho para que Dios les siga protegiendo, incluso en las aulas de clase donde ya no será posible una oración y mucho menos la hermosa imagen de la Virgen del Valle. Es el tiempo de la verdad y esa verdad nos hará libres en la medida en que Dios sea un Padre de todos y de un modo muy especial para todos los niños. Pues lo de la educación es un tema moral que se ha tornado en un enfrentamiento muy triste y de gran magnitud. “El artículo 6 no es parte de una ley de educación, sino un ilícito del capricho de quienes se creen dueños de la patria. De una Patria que le duele como se omite el artículo 50 de la actual Ley Orgánica de Educación. Y mata el artículo 59 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela” |
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Dime que te cuento y te diré que aprendes Padre Marcelo Rivas Sánchez www.diosbendice.orgNO A LA DESINFORMACION Con la gracia de Dios y el favor de Monseñor Alfredo José Rodríguez Figueroa, que en paz descanse, pude ir a la Universidad Autónoma en Puebla, México a estudiar comunicación como herramienta para una mejor Comunicación Pastoral y desde ahí, pude observar la necesidad que tiene la Iglesia de evangelizar sin despreciar a los Medios de Comunicación y la vez, vi con claridad que quien tiene el poder – dinero maneja la verdad a su antojo en ausencia de valores que respeten la libertad de expresión. Hoy en día, delante de la verdad y que nos hace bien libres, (Juan 8,32) para que en nombre de la libertad pueda decirlo sin ningún temor: se está abusando de un poder dejando a un lado que ese poder fue dado por el pueblo para que trabajen a favor de todos y no para sacudirse lo que les hace sombra o no le sirven para su “revolución” Por eso nuestros Obispos han sabido expresar que “Los Medios de Comunicación Social deben prestar un valioso servicio, informando sobre los hechos de manera objetiva; promocionando la verdad y la justicia, la paz y la libertad, la solidaridad, las buenas costumbres, la convivencia ciudadana, las exigencias de la vida; defendiendo la dignidad de la persona humana y sus derechos; orientando las mentes y los corazones con una visión ética” Es decir, que los Medios deben informar sin olvidar la ética y que el estado debe garantizarlo. Entonces, los Obispos defienden la libertad de expresión como derecho para crecer como personas. Entonces no puede ser posible que por una situación política donde no aceptan denuncias o no quieren que la gente se entere, se comience a crear un ambiente muy hostil contra los Medios que no le aplauden o por lo menos no se adhieren a sus cuestiones de repetición politiquera. Un Estado está para facilitar la comunicación no para cerrarla o canalizarla hacia su propio provecho. Es más, los Medios son necesarios para la defensa de la democracia y en donde todos participemos. Bien lo dice la Constitución en su número 57 “Toda persona tiene derecho a expresar libremente sus pensamientos, sus ideas u opiniones de viva voz, por escrito o mediante cualquier otra forma de expresión, y de hacer uso para ello de cualquier medio de comunicación y difusión, sin que pueda establecerse censura. Se prohíbe la censura a los funcionarios públicos o funcionarias públicas para dar cuenta de los asuntos bajo sus responsabilidades” No es posible que ahora se imponga una cerrazón de emisoras, canales de televisión y se pongan unas exageradas leyes para amedrentar, asustar y hacer silencio y todo porque no se comulgan con esas ideas revolucionarias. Porque no es un secreto que, también, por muchos más motivos se coarta la libertad expresión o simplemente se encadenan para ofender, humillar e incluso imponerse por encima de principios de un venezolano que quiere disfrutar de su espacio libre en sano descanso con su familia. La idea de este artículo es crear conciencia de que, por ningún motivo, se puede permitir que nos quiten la libertad de expresión y mucho menos estar cerrando canales de información donde un gobierno se imponga a la brava y sin mirarse así mismo, donde hay un desagrado de los oyentes, lectores y televidentes para que la audiencia sea muy baja e incluso se cae en el absurdo de que las emisoras comunitarias, que son un logro buenísimo, se limitan, en su mayoría, ser canales de repetición de cadenas y de propaganda gubernamental sin tener sentido crítico o reflexión de lo bueno o malo. Por eso, no podemos aceptar que se nos niegue la información variada, libre que depende de cada uno de los gustos de las personas y no de un gobierno que persigue un socialismo que no se ve por ningún lado. Si fuera tan productivo Venezuela no estaría tan enfermo, pero de mortandad, delincuencia y pobreza que cada día pasa de castaño a más oscuro. Todos tenemos que estar claros en lo referente a la Constitución en su número 58 “La comunicación es libre y plural, y comporta los deberes y responsabilidades que indique la ley. Toda persona tiene derecho a la información oportuna, veraz e imparcial, sin censura, de acuerdo con los principios de esta Constitución, así como el derecho de réplica y rectificación cuando se vean afectados directamente por informaciones inexactas o agraviantes. Los niños, niñas y adolescentes tienen derecho a recibir información adecuada para su desarrollo integral” Esto debemos leerlo para saber que en ellos está una mentalidad militarista que la orden se da y hay que “parirla” sin medir las consecuencias. Volvamos a escuchar a nuestros Obispos: “Vemos con suma preocupación que decretos y legislaciones sin suficiente consulta y sin consenso en esta materia pretenden imponer hegemónicamente una determinada visión de la vida y de la sociedad” Una sociedad desinformada es una sociedad a la deriva que se manipula fácilmente y se le engaña dándoles una sola visión de los acontecimientos. Esto si es manejar la información y hacer creer que todo está bien, siendo todo lo contrario. Como hoy en día sucede con la información de los canales oficiales. Si creen que esto no es verdad escuchen, observen y lean sus informaciones para que descubran la verdad verdadera. Para terminar no hay que olvidar, para este tiempo de decisiones, lo grandioso del artículo 6 de la Constitución. "El gobierno de la República Bolivariana de Venezuela y de las entidades políticas que la componen es y será siempre democrático, participativo, electivo, descentralizado, alternativo, responsable, pluralista y de mandatos revocables." Y yo agregaría, por los siglos de los siglos. Amén.
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Dime que te cuento y te diré que aprendes Padre Marcelo Rivas Sánchez
Dicen los niños: Somos personas. “La moral sin la religión carece de su fundamento” (Simón Bolívar)
No hay nada más maravilloso que reunirse con niños y dejarlos actuar para que cada uno tenga lo mejor de ellos en una placentera experiencia. A un niño le preguntó la maestra. ¿Qué es el amor? y el niño respondió: ayer acompañé a llorar a un viejito que le dolía mucho la espalda. Por eso ante el papel que lo convirtieron en ley de educación los niños tienen que hablar, pero no como soldaditos de la revolución al mejor estilo de los pioneritos cubanos, para afirmar de entrada que ellos son personas y por tal piensan y saben mucho, por lo menos mis sobrinos que me dejan con la boca abierta. El futuro dependerá de lo que hagamos ahora, y ciertamente, hay mucho que hacer. Ese hacer es hoy. Cabe, entonces aquí, recordar el sueño que tenía Martin Luther King: “Soñar a mis hijos Que triste es ver como hoy nos quieren dividir e incluso sacar a Dios de las escuelas para que haya campo para otras cosas. Es vaciar el morral de cada niño y meterle junto al lápiz y el cuaderno el color de la política, de la negación a la verdad y descargarla en unos consejos comunales que niegan la participación y cumplen disposiciones estrictamente del orden partidista. Se hace necesario que actuemos y en ese hacer está principalmente criar a los hijos no tanto en lo que les guste, sino en lo que les enseñe, por eso una mala madre o un mal padre es el que visita a sus hijos por la noche y los bendice; les pregunta por la tarea y los obliga a ser responsables; los que le levantan por la mañana a bañarse; saben quienes son los amigos o amigas… Debo, con mucho sentimiento relatar lo que experimentó el rey Pelé delante de la verdad de su hijo. Pelé apareció en la televisión con lágrimas en los ojos para reconocer la falta de su hijo Edson de 35 años, quien debe responder por la asociación delictiva con narcotraficantes y puede ser condenado a 15 años. Además agregó: como cualquier padre, es triste ver a tu hijo metido en grupos como ése y ser arrestado, pero él tendrá que sufrir las consecuencias. Reconoció, desafortunadamente, yo quizás estaba demasiado ocupado y no me di cuenta. Es lamentable, porque yo siempre he peleado contra las drogas y no noté lo que pasaba en mi propia casa. A los niños hay que tratarlos no encadenarlos; hacerles un camino que tenga espinas y rosas para que ellos encuentren las rosas y sepan que las espinas hacen daño. De no tratarlos con dignidad será nuestros propios verdugos, monstruos, prepotentes que sufrirán y harán sufrir a los demás. Dejar que sean personas no es comprarles las conciencias con el dinero o encaminarlos por un sendero revolucionario donde los grandes ni hacen lo que dicen, ni dicen lo que deben hacer. Pues ser persona es respetarles su futuro donde Dios los abrazó al entrar al mundo y de seguro, los guiará hasta la patria definitiva. Vale la pena, entonces, volver a la escuela y desde ella repetir una y cien veces más, lo que dijo el Cardenal Urosa: “No saquen a Dios de las escuelas, pues la Enseñanza Religiosa en las Escuelas, un inmenso bien y un derecho adquirido” Ojalá, todos, especialmente los padres de familia, despierten y salgan en defensa de sus hijos, de los niños para que siendo personas se les respete el derecho para que Dios les siga protegiendo, incluso en las aulas de clase donde ya no será posible una oración y mucho menos la hermosa imagen de la Virgen del Valle. Es el tiempo de la verdad y esa verdad nos hará libres en la medida en que Dios sea un Padre de todos y de un modo muy especial para todos los niños. Pues lo de la educación es un tema moral que se ha tornado en un enfrentamiento muy triste y de gran magnitud. “El artículo 6 no es parte de una ley de educación, sino un ilícito del capricho de quienes se creen dueños de la patria. De una Patria que le duele como se omite el artículo 50 de la actual Ley Orgánica de Educación. Y mata el artículo 59 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela” |
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Dime que te cuento y te diré que aprendes Padre Marcelo Rivas Sánchez
Tiempos difíciles y de oportunidad para el testimonio.
Cuando uno por encima lee el artículo 6 de la nueva ley de educación y se encuentra con que “el estado mantendrá en toda circunstancia su carácter laico en materia educativa, preservando su independencia respeto a todas las corrientes y organismos religiosos. Donde las familias tienen el derecho y la responsabilidad de la educación religiosa de sus hijos e hijas de acuerdo a sus convicciones y de conformidad con la libertad religiosa y de culto, prevista constitucionalmente” Uno tiene que decir que en las escuelas nada de religión. Nada de impartir educación religiosa y veremos si se puede hacer uno la señal de la cruz y en vez de eso, gritar la consigna de la muerte a la que nos quieren acostumbrar. Entonces nada de crucifijos. Nada de la imagen de la Virgen del Valle en los salones de clase. Nada de nada en materia religiosa. Todo por la borda. Todo al cesto de basura, pero si levantar en hombros al rescatado che Guevara o cualquier prototipo que ayuda a este socialismo. Recuerdo a San Tarsicio que es el patrón de los Monaguillos y de los Niños de Adoración Nocturna, que s ele conoce como el mártir de la Eucaristía. Siendo Valeriano emperador, quien pensaba que los cristianos eran los enemigos del imperio y por eso se debía acabar con ellos. Ante esto los cristianos para poder celebrar su culto se debían reunir a escondidas en las catacumbas o cementerios romanos. Con la tristeza que estando allí llegaban los soldados y los decapitaban o les infligían otros martirios. Allí nació San Tarsicio quien un día estando celebrando la Eucaristía en las Catacumbas de San Calixto, es elegido para que lleve la comunión a los encarcelados. Sale fervoroso a llevar tan preciada encomienda. De camino se encuentra con unos niños de su edad que estaban jugando. Ellos le insisten en jugar. Tarsicio responde que otro día mientras apretaba sus manos con fervor sobre su pecho. Y uno de aquellos mozalbetes exclama. A ver, a ver. ¿Qué llevas ahí escondido? Lo derriban a tierra, poniendo en su pecho los mozalbetes sus piernas con el fin de hacer fuerza de palanca para abrirle sus bracitos y arrebatarle las Sagradas Formas, le tiran pedradas, y Tarsicio no solo puso resistencia sino que Dios hizo el milagro de que quedasen sus brazos herméticamente cerrados de forma que no pudieron abrírselos jamás (ni siquiera después de muerto) siguen dándole pedradas, y va derramando su sangre. Todo inútil. Ellos no se salen con la suya. Por nada del mundo permite que le roben aquellos Misterios a los que él ama más que a sí mismo... Así pasa hoy, en una posible ley, nos quieren quitar el sagrado deber de enseñar en las escuelas el amor a Dios, incluso, con la pregunta con mayor preocupación. ¿Habrá financiamiento, subsidios para las escuelas católicas? Todo que se quede en las cuatro paredes del templo. Para que mañana ni las procesiones no las permitan. Para una muestra un botón, desde hace tiempo no puedo pasar la procesión del Nazareno por el sector la peptonas. Pues el socialismo sigue con el pan y circo. A todos los padres de familia. A todos los niños les invito a nunca olvidar aquellas palabras de Jesús desde la cruz “Perdónalos Señor, pues no saben lo que hacen”. Hoy “no saben” quien fue y qué enseñó Jesucristo, y qué ha significado Jesús de Nazaret en estos años. No saben que el evangelio no le hace daño a nadie y que es bueno que todos, sin excepción, aprendan las lecciones que nos da el crucificado por amor. Lecciones de amor, de perdón, de la dignidad de la persona humana aunque sea nuestro enemigo. Pues no puede ser que en nombre de una “libertad” que ellos siempre restringen, vayan a seguir abusando del gran significado de la escuela donde el amor de Dios se tiene que reflejar y enseñar. Nunca, pero nunca aceptemos nada que carezca del amor de Dios. Sin Dios nada. Con Dios todo. Y por encima de todo, jamás aceptar como amor nada que carezca de verdad. Muy bien dicho y sostenido por Santa Teresa Benedicta de la Cruz. Quitar de las escuelas este supremo derecho es dejar que entre la rabia, la tristeza y el maligno que anda como león rugiente buscando a quien devorar. Entonces Niños – Niñas ahora sí. Sin miedo, sin cobardía a pedirle a la maestra que rece antes de comenzar la clase y a llevar estampitas de la Virgen, de los santos para repartir y hacer durante un ratito del recreo una oración de unidad y mucha fe. Porque entre más nos prohíban más seremos hijos del Dios del amor y de la paz. Que viva la escuela como catacumbas de la ruina y el abuso de la autoridad. San Tarsicio ayúdanos porque sólo el amor es digno de fe.
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Dime que te cuento y te diré que aprendes Padre Marcelo Rivas Sánchez
Es muy peligroso cruzarse de brazos delante de la verdad.
“Dios, concédeme serenidad para aceptar las cosas que no puedo cambiar, valor para cambiar aquellas que puedo y sabiduría para reconocer la diferencia”
Hay preocupación. Hay angustia. Hay mucha incertidumbre propia de un país que ha sufrido el engaño de una mejor calidad de vida y en la actualidad hay simples paños de agua tibia donde se han dilapidado muchos dineros sin observar crecimiento. ¿Qué hacer?, acaso dejar pasar el tiempo y seguir esperando o simplemente sonreír con la oración de serenidad que reza un miembro de alcohólicos anónimos esperando que “sólo por hoy no beberé” Aquí lo importante no es sentirme bien hoy y mañana mal. O alejarme de algo que me hace daño sin que me importe lo que esté pasando a mí alrededor. Pues somos muchos que nos obsesionamos con cosas que no podemos cambiar en este momento y por eso caemos en una desesperación propia de los que son vencidos para cruzarnos de brazos y darnos el lujo de dejar pasar el bochorno y vergonzosa situación. Esta postura hace que aparezca una conducta delictiva de una critica que ataca toda iniciativa; una queja propia de los negativos que en todo ven obstáculos; la comparación para evitar avances; una malsana competición para caer en la disputa propia de hermanos que siembran odio y enfrentamiento. Desde ya se han abierto un abanico de situaciones sumamente peligrosas donde unas realizaciones: cierre de emisoras, toma de empresas privadas, ataque delincuencial a medios televisivos y organización de enfrentamientos entre mismos venezolanos producen mucha carga negativa en el desarrollo propio de una sociedad. Analicemos el problema. Está en desarrollo un plan, una estrategia para intimidar a la sociedad. Recordemos que ya van diez años donde la inseguridad galopea sin parar. Es el momento de presentar alternativas de solución y desarrollar caminos para llegar a las alternativas de salida. Analizar no es quedarse en silencio a esperar. Sino que es tomar de conciencia delante de lo que está sucediendo. No podemos permitir que todos vayamos a la guerra como único medio para dirimir las diferencias. No basta con decir “tengo la intención de hacer esto” sin olvidar que la entrada del infierno está alfombrado por buenas intenciones. Presentar alternativas nada tiene que ver con violencia, pero sí con acciones contundentes que sean capaces de hacernos descubrir la gravedad de lo que está pasando. Por eso hay que ser sensibles y sensatos para hacer algo y de inmediato. Sin caer en la critica que destruye “dizque al oponente” pero paralizada toda acción inteligente. Pensamos que esa crítica descubre al delincuente, pero nos quita la responsabilidad en lo que está pasando. Entonces hace falta mucha disciplina para una acción donde se tenga un objetivo claro para lograr resultados. Vivimos momentos muy tristes que van más allá de una crisis. Estamos delante de un país que no necesita tanto que critiquemos sino que actuemos. Hay necesidad de reunirnos para conocer y sentir que todo esto afecta a todos. Claro, alguien tiene que encaminar, llamar y convocar a una sociedad que no quiere accionar por el miedo. No hay que negar que toda esta gran inseguridad produzca mucho temor para paralizar las mejores ideas. Entonces, hacer, en forma unitaria, es una acción que no es simple elección, sino una necesidad que rompe el miedo, desbarata la cobardía y aparece un valor en la ejecución. Ha llegado el tiempo para dejar de ser simples veletas agitados por el viento bravo para empezar a ser timones y faros de luz que guíen e iluminen acciones que favorezcan cambios para el bien de todos dentro de un país que ha caído en la barbarie de donde los mismos pobres se están matando y aquí no pasa nada. Hay una cita escrita por Martin Niomoeller, sobreviviente de las prisiones nazis “Primero arrestaron a los comunistas, pero yo no era comunista, así que no hice nada. Más tarde vinieron a por los social demócratas, pero yo no era social demócrata, así que no hice nada. Después arrestaron a los sindicalistas, y no hice nada porque yo no era uno de ellos. Y luego vinieron por los judíos y después, por los católicos, pero yo no era ni judío ni católico y por eso no hice nada. Finalmente vinieron a por mí y me arrestaron, y ya no quedaba nadie para que pudiera hacer algo al respecto” |
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Dime que te cuento y te diré que aprendes Padre Marcelo Rivas Sánchez “Debemos convertirnos en el cambio que buscamos en el mundo” (Gandhi) En unidad para dar un golpe de timón.
El mundo somos todos y en el mundo está Venezuela. Esta Venezuela que atraviesa un doloroso camino donde el enfrentamiento y no la convivencia; la dureza del verbo y no el dialogo; la rabia y no el perdón se manifiestan a diario para aplastar toda clase de disidencia o de pensamientos contrarios a un modelo socialista que para muchos no se digiere, sino que se hace tragar a cucharadas de mucha violencia. Hay más que una sensación. Es una impotencia que ralla en una rabia que poco a poco va creciendo. Es un país lleno de una terrible angustia donde uno se acuesta y se pregunta: ¿Qué pasará mañana al despertarme? ¿Quién será el próximo muerto, asaltado, secuestrado? Es esa angustia que nos produce mucho miedo y por lo tanto, una fuerte paralización y es aquí donde se necesita el nacimiento de personas impulsadas por una conciencia que busque de inmediato un cambio para regresar al respeto, el aprecio y la valorización. Hojear la historia es encontrarnos con Gandhi, Martin Luther King, Teresa de Calcuta, Juan Pablo II, inclusive un Nelson Mandela, quienes instalaron en sus vidas fuertes impulsos de liderazgo activo para superar, abrir caminos e instalar fortalezas para motorizar sus actividades a favor de muchos. De ahí, la necesidad de despertar esa fuerza entre nosotros, que no es el esfuerzo de un único individuo, sino que es el esfuerzo de todos. Es la creación de un equipo que creen en las personas y sus fortalezas para organizarse y actuar. Sin caer en la tentación de la simple crítica o quedarse con lamentos de lágrimas de cocodrilo que son gotas de una lluvia que ni moja y mucho menos empapa. Necesitamos actuar en armonía comunitaria que produzca un imperativo moral, es decir, que hay que actuar y punto dentro de las libertades y respeto de una sociedad que necesita dar respuesta a tan graves problemas. Entonces, la complicidad o el silencio ante tantas injusticias es una actitud muy negativa. Y es aquí donde quiero insistir. Pues somos muchos que ante las situaciones por la cual atravesamos delante de quien nos arremete siempre respondemos: somos víctimas que hemos intentado de todo; no podemos hacer nada más; estamos atollados para que nos venga una sobrecarga de tristeza y frustración. Esto es lo que persigue el enemigo “dividiendo voy triunfando” Vuelvo a insistir nuestro problema está en la falta de unidad para producir un efectivo estilo de acción. Pues pensamos que el problema que nos detiene está afuera de nosotros y eso es mentira. El problema está dentro de cada uno. Dentro hay mucha desconfianza donde el propio pensamiento es el gran problema. Ante esto sentimos lástima por el otro y no le valoramos. Nos quejamos y llegamos a gritar ¡es una injusticia! Pero no damos el paso y nos quedamos en la congoja propio del que llora y se come las lagrimas para curarse el miedo que pega en el estómago. Venezuela no saldrá hasta que no deje a un lado el que tenga que culpar siempre a otros y jamás se responsabilice por lo que está sucediendo. Necesitamos confianza para luego comprender lo que está pasando y así actuar en armonía con la verdad que siempre nos hará más libres. No más de eludir nuestras responsabilidades y hacer lo propio para transformar transformándose. Es la hora de un cambio admirable y responsable. Es la hora de hacer algo no en la locura de un desespero, sino en la acción unificada para influir y mover a quienes se sienten aplastados y detenidos por el absurdo miedo. ¿Qué es lo mejor que debo hacer en estos acontecimientos?
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Dime que te cuento y te diré que aprendes Padre Marcelo Rivas Sánchez
Para tiempos de crisis comunicacional. Pareciera que el Gobierno, el estado, que en definitiva es la misma cosa, le tienen un miedo tan grande a los Medios que buscan y rebuscan para justificar su acción de silenciarlos. Proceso que, de seguro, les costará muy caro, ya que los venezolanos nos gustan estar informados y un poquito de aquello que es malo pero entretiene (chisme) Desde aquí, ventana de opinión, invito a los Medios y a los que deseamos estar informados a no desmayar a seguir creciendo en unidad de convicición de que sin Medios no habrá una sana libertad de expresión. Todo esto ha dado pie a reconocer que los Medios son parte de nuestra vida diaria. Uno se levanta con ellos e incluso se acuesta también. Las noticias, los deportes, las películas, las novelas, los documentales… Todo una gama de compañía, de entretenimiento y de esa especie de ventana mundial donde Herbert Marshall McLuhan revive con su “aldea global” en la cual de todo se sabe aunque sea tan pequeña gracias a los Medios. Pero avanzó más y llegó a decir “el medio es el mensaje” donde la realidad se percibe gracias a la relación con la estructura y la forma de información y cada medio está en contacto a su vez con una parte de la psiquis humana. En medio de esta crisis se necesitan buenos comunicadores que con calidad de información respondan a estos movimientos de tanto atraso y cobardía. Hoy más que nunca se requiere de hombres y mujeres bien formados en donde una sana doctrina que envuelva lo ético, lo moral y lo social como elementos de un buen criterio para despejar cualquier duda que pretenda censurar o eliminar la libertad de expresión. Un buen periodista o buen comunicador debe ser una persona íntegra, un individuo cuya vida personal se vea reflejada sus debilidades humanas, pero también sus principios de valor y de familiaridad. Es decir, que debe ser una persona con coraje de decir y defender la verdad, aún cuando la verdad no convenga o sea políticamente incorrecta. Para estos momentos de experimento a la vuelta del comunismo atrasado y retrógrado hace falta periodistas, comunicadores valientes que no se vendan, que no retrocedan por prebendas y muchos menos llegar a una censura propia arropada en el miedo. El primer modelo es Cristo Jesús que comunicó sin temor la voluntad de su Padre Dios de una forma humilde y veraz. Lo vemos en la Última Cena lavando los pies a sus discípulos que más que simple servicio es amor del puro. El segundo modelo es la Virgen María, que guardaba todo en su corazón, pero siempre haciendo caso a lo mandado. Ella va y viene con plena confianza en el Señor que la llamó a dar una respuesta positiva a la Encarnación. El tercer modelo es la familia, lugar donde los valores se hacen persona y forma para desarrollar una vida productiva a favor de todos. Entonces, es el momento de vivir la frase que se desarrolló con la visita del Papa Juan Pablo a Venezuela: “Despierta y Reacciona. Es el momento” Pues delante de la verdad los medios comunicacionales llevados por el gobierno no son el mejor ejemplo. Por eso, en este momento se hace necesario Medios que respeten la dignidad humana, la justicia, el diálogo y la paz. A la Comunicación no la detiene nadie y mucho menos quienes trafican con Medios para desarrollar solamente fines políticos y proselitistas sin respeto y creyendo que tienen la verdad y eso es falso. Pues esa verdad tiene unos receptores que en definitiva son los que deciden. Si Venezuela está sumida en miles de problemas y necesita de todos, es entonces, cuando los Medios de Comunicación deben salir a buscar salidas y a crear soluciones donde el concurso de todos sea no un privilegio, sino una alternativa prioritaria. Si nosotros permitimos que se silencien los Medios perderemos no sólo el control para buscar información, sino la oportunidad de exigir una excelente comunicación. De ser así, entonces muy pronto, vendrán comisiones por los pulpitos, los atriles y las sedes de nuestro presbiterio en cada uno de los templos parroquiales porque en ellos se dicen muchas verdades y eso atenta contra la seguridad del estado papá que castiga a los que no le obedecen y reprime sin contemplación a los que no piensan como ellos. Si les permitimos hacer lo que les venga en gana con los Medios. Mañana seremos sus esclavos y sin poder reclamar pues ya sería muy tarde. |
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Dime que te cuento y te diré que aprendes Padre Marcelo Rivas Sánchez
Para tiempos de crisis comunicacional. Pareciera que el Gobierno, el estado, que en definitiva es la misma cosa, le tienen un miedo tan grande a los Medios que buscan y rebuscan para justificar su acción de silenciarlos. Proceso que, de seguro, les costará muy caro, ya que los venezolanos nos gustan estar informados y un poquito de aquello que es malo pero entretiene (chisme) Desde aquí, ventana de opinión, invito a los Medios y a los que deseamos estar informados a no desmayar a seguir creciendo en unidad de convicición de que sin Medios no habrá una sana libertad de expresión. Todo esto ha dado pie a reconocer que los Medios son parte de nuestra vida diaria. Uno se levanta con ellos e incluso se acuesta también. Las noticias, los deportes, las películas, las novelas, los documentales… Todo una gama de compañía, de entretenimiento y de esa especie de ventana mundial donde Herbert Marshall McLuhan revive con su “aldea global” en la cual de todo se sabe aunque sea tan pequeña gracias a los Medios. Pero avanzó más y llegó a decir “el medio es el mensaje” donde la realidad se percibe gracias a la relación con la estructura y la forma de información y cada medio está en contacto a su vez con una parte de la psiquis humana. En medio de esta crisis se necesitan buenos comunicadores que con calidad de información respondan a estos movimientos de tanto atraso y cobardía. Hoy más que nunca se requiere de hombres y mujeres bien formados en donde una sana doctrina que envuelva lo ético, lo moral y lo social como elementos de un buen criterio para despejar cualquier duda que pretenda censurar o eliminar la libertad de expresión. Un buen periodista o buen comunicador debe ser una persona íntegra, un individuo cuya vida personal se vea reflejada sus debilidades humanas, pero también sus principios de valor y de familiaridad. Es decir, que debe ser una persona con coraje de decir y defender la verdad, aún cuando la verdad no convenga o sea políticamente incorrecta. Para estos momentos de experimento a la vuelta del comunismo atrasado y retrógrado hace falta periodistas, comunicadores valientes que no se vendan, que no retrocedan por prebendas y muchos menos llegar a una censura propia arropada en el miedo. El primer modelo es Cristo Jesús que comunicó sin temor la voluntad de su Padre Dios de una forma humilde y veraz. Lo vemos en la Última Cena lavando los pies a sus discípulos que más que simple servicio es amor del puro. El segundo modelo es la Virgen María, que guardaba todo en su corazón, pero siempre haciendo caso a lo mandado. Ella va y viene con plena confianza en el Señor que la llamó a dar una respuesta positiva a la Encarnación. El tercer modelo es la familia, lugar donde los valores se hacen persona y forma para desarrollar una vida productiva a favor de todos. Entonces, es el momento de vivir la frase que se desarrolló con la visita del Papa Juan Pablo a Venezuela: “Despierta y Reacciona. Es el momento” Pues delante de la verdad los medios comunicacionales llevados por el gobierno no son el mejor ejemplo. Por eso, en este momento se hace necesario Medios que respeten la dignidad humana, la justicia, el diálogo y la paz. A la Comunicación no la detiene nadie y mucho menos quienes trafican con Medios para desarrollar solamente fines políticos y proselitistas sin respeto y creyendo que tienen la verdad y eso es falso. Pues esa verdad tiene unos receptores que en definitiva son los que deciden. Si Venezuela está sumida en miles de problemas y necesita de todos, es entonces, cuando los Medios de Comunicación deben salir a buscar salidas y a crear soluciones donde el concurso de todos sea no un privilegio, sino una alternativa prioritaria. Si nosotros permitimos que se silencien los Medios perderemos no sólo el control para buscar información, sino la oportunidad de exigir una excelente comunicación. De ser así, entonces muy pronto, vendrán comisiones por los pulpitos, los atriles y las sedes de nuestro presbiterio en cada uno de los templos parroquiales porque en ellos se dicen muchas verdades y eso atenta contra la seguridad del estado papá que castiga a los que no le obedecen y reprime sin contemplación a los que no piensan como ellos. Si les permitimos hacer lo que les venga en gana con los Medios. Mañana seremos sus esclavos y sin poder reclamar pues ya sería muy tarde. |
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Dime que te cuento y te diré que aprendes Padre Marcelo Rivas Sánchez POR LOS CAMINOS DE LA MENTIRA Estamos caminando de una mentira tras de otra. Pues pareciera que no se puede vivir sin la mentira, pues todo es una mentira. Cada quien arrima sardina para su sartén. Olvidando lo que dice el Eclesiástico 20,26 “La mentira es una tacha infame en el hombre” En estos días se ha pronunciado mucha gente del gobierno en contra de lo que sucedió en Honduras, pero ninguno de ellos ha dicho nada acerca de lo que sucede en Venezuela. ¿Es qué acaso lo que le está pasando a la Alcaldía de Caracas no es algo parecido, semejante e igual? Otros desde el parlamento han gritado que lo sucedido en Perú con los enfrentamiento es la amazonia es una gran tragedia. Cuestión que compartimos y repudiamos, pero, hacen silencio frente a la sangría y mortandad en Venezuela. Entonces, se vive en una situación de mentira continuada y hasta que ofende los sentimientos de venezolanos y familias que han perdido un ser querido. En estos días, aquí en Cumaná, se llevó a efecto una concentración roja para reclamar enérgicamente por el “supuesto magnicidio” y mucha gente se agrupó y vinieron connotados dirigentes del gobierno. De seguro, muchos, un agran mayoría ha perdido hijos, han sido atracados, carecen de elementos básicos para vivir conforme a la verdad y ahí estaban gritando consignas y oyendo insultos de personeros que alimentan la mentira. Todo se encamina a que no se puede hacer ningún negocio sin la mentira, ya no es posible hacer política sin la mentira por delante. Es tanta la mentira que desde el parlamento se quiere reformar el Código Orgánico Procesal Penal para favorecer la mentira y poder criminalizar a todos los contrarios. En estos momentos se ve como un gran peligro que a los mentirosos los estemos “admirando” con frases como “tiene mucha chispa”, además con aquello de que tiene “aptitud para la vida” “Es un rolo de vivo” y se deja a un lado la realidad de que es un mentiroso y engaña y daña a muchos. A esto se agrega que hay una gran guerra verbal donde los insultos, las descalificaciones están a la orden del día. Todo el que piense diferente a ellos se verá destrozado por una lengua viperina y destructora. Habrá que recordar lo que decía San Bernardo: “La lengua es una lanza, la más aguda; con un solo golpe atraviesa a tres personas: a la que habla, a la que escucha y a la tercera de quien se habla. Desde el más alto nivel del gobierno se arremete a diario sin piedad y sin respeto alguno. Bien queda aquí el proverbio Alemán: “El burro se delata por sus orejas; el tonto, por sus palabras” Gritar y maldecir en medio de la mentira es muy grave pues se está dando la sensación que la mentira es un valor y la verdad una tontería. Todo esto trae aceleramiento a la impunidad, corrupción campante y un permitir y permitir donde el actuar en la mentira es algo natural y hasta muy novedoso. Recuerdo el día que fue un gobernador para un pueblo y dijo en voz alta “desde hoy el puente y el secretario le susurró al oído. Gobernador eso ya lo dijo el mes pasado. El gobernador le respondió: tranquilo que la gente olvida pronto” Por eso hoy se nos propone vivir en la verdad, pues si somos de Cristo, y Cristo es la verdad, andemos en la verdad. Así como todo lo que brilla no es oro. No todo lo que se dice es verdad. Hay mucha manipulación y demasiada mentira detrás de lo que se está haciendo. Esto es una estrategia para engañar y enfrentar a los mismos paisanos. Es como una mentira fabricada y diseñada como maniobra para no solamente destruir la verdad, sino para confundir y hacer presente un ambiente que no da respuesta a los problemas sino se cabalga de un problema a otro sin resolver ningún problema. Veracidad es la consigna. La verdad la meta. Pues un país sin veracidad será un país de injustos donde la mentira es su propio engaño. |
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Dime que te cuento y te diré que aprendes Padre Marcelo Rivas Sánchez En medio de tanto dolor Vivimos tiempos muy extraños. Tan extraño que ya no nos extraña tanta muerte. Pareciera que hemos caído en la indiferencia y simplemente cada uno espera su turno a la hora de aquello de que “al que le toca le toca” Pero, no todos piensan así. Creo que todavía quedan muchos que se resisten a vivir tan distantes para convertirse en cómplices. A esos les escribo para animarlos y a los otros para que intenten, por lo menos, por hoy, cambiar de actitud. La Religión tiene su propia libertad que encarna los valores trascendentales, que son los mismos fundamentos de la fe y de la humanidad. Por eso no podemos separar vida y fe, pues en los dos está centrada la gran dignidad de la persona. Entonces cuando se violan sus derechos todo se debilita y cae por una fuerza de tristeza y enfrentamiento. Debemos aprender a vivir y no simplemente tender paños de agua tibia, pues conocer al hombre simplemente por fuera es caer en la ignorancia total. Lo importante es conocerse a sí mismo para alcanzar la sabiduría. A la sazón no podemos escondernos como el avestruz, escondiendo la cara y dejando el cuerpo al descubierto donde se nos ven las costuras. Esto se traduce en una situación muy grave donde en Venezuela hay una inmensa sangría. Mortandad que nos coloca en uno de los países más violentos del mundo. Ante esto nos toca revisar y reflexionar:
Es el momento de detenernos y pensar seriamente acerca de tal situación. No para escudarnos, mucho menos para alegrarnos, sino para buscar salidas o soluciones. Se hace necesario:
Bien lo repetía mi papá Josefino “Quien ha aprendido a sufrir sabe enseñar a otro a vivir” Y es lo que nosotros, de inmediato debíamos iniciar. Pues hay mucho dolor, demasiada tristeza donde vemos con impotencia una técnica dilatoria, de indolencia e incluso de una dejadez por parte de los organismos del gobierno donde, perdonen, pero me parece que nada les importa. Es el momento de colocarnos de frente de tal situación y empezar a hacer algo y de inmediato. Una cruzada para tomar conciencia. Una conciencia que nos una en la oración y la acción. Aquí es un llamado a todos, sin distingos, sin estar buscando más patas al gato. Es una necesidad y punto. Nadie puede se excluido. Aquí no importa por quien votaste o a quien elegiste en los últimos comicios electorales. Aquí es una decisión por la vida y un no por la muerte. No debe haber desánimos, ni mucho menos escondiendo la verdad que a todos nos golpea. No es cuestión de defender a fulano porque me da trabajo para el hijo mayor, pero me expone al menor a la muerte en medio de una violencia que chupa a cualquiera. Debo seguir invitando a todos y nosotros los cristianos que creemos en la vida eterna, no podemos quedarnos en la espera de una vida que dura para siempre, sino más bien una nueva calidad de existencia, plenamente inmersa en el amor de Dios, que libra del mal y de la muerte. “Si no lo hacemos hoy mañana será un cementerio de cobardes” |
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Dime que te cuento y te diré que aprendes Padre Marcelo Rivas Sánchez De Corazón a Corazón “Sagrado Corazón de Jesús. En vos confió” Hoy estamos en la víspera de la Solemnidad del Corazón de Jesús, que se refiere al misterio de Cristo donde nos grita en labios de San Francisco “El amor no es amado” para llamarnos e incorporarnos a ese gran mandamiento: “Amarás al Señor, tu Dios, con todo tu corazón, con toda tu alma y con toda tu mente” (Mateo 22, 37) Ya que lo que estamos observando en nuestros ambientes es una total lejanía de Dios. Estamos delante de una sociedad que necesita, con urgencia, a Jesús para que les perdone los pecados y les restaure el corazón y así puedan capacitarse para vivir en su amor y su gracia. Ese corazón traspasado con la lanza del soldado allá en el calvario que al mostrarnos sangre y agua nos estaba diciendo que derramaba su amor a todos. Un amor que sabe perdonar. Perdón que conoció la Santísima Virgen María cuando el viejo Simeón se lo advirtió: ““¡Y a ti misma una espada te atravesará el alma!, a fin de que queden al descubierto las intenciones de muchos corazones (Lucas 2,35) Este amor que brota del Corazón de Jesús no es un derecho sino un regalo de Dios. Solo cuando el amor es de entrega, sin interés. Entonces es el mismo amor de Dios. Es el siglo XVII cuando la devoción al Corazón de Jesús se llega a propagar de manera sin precedentes. El gran santo y fundador, Juan Eudes fue el primero que organizó y celebró las fiestas del Corazón de Jesús y el Corazón de María. Por la misma época Santa Margarita María de Alocoque , novicia de la Visitación, recibe apariciones de Jesús quien le muestra su Corazón y le comunica mensajes que transformaron su vida. Ella recibe la promesa de los Nueve Primeros Viernes. Como la devoción al Corazón de Jesús está vinculado con la Eucaristía, la Iglesia y la Virgen María. El Papa Benedicto XVI ha querido en esta hermosa solemnidad declara el Año Sacerdotal. Como un momento de fe para la conversión diaria y de una manera muy especial para los que han recibido el don de la Ordenación sacerdotal. Conversión que se centra en la identidad eclesial para renovarse en la alegría de un servicio libre y lleno de amor a Dios y a todos. Cómo lo dice el Papa: “Ofrezca el espacio a Cristo, Buen Pastor, para que El pueda vivir dentro de nosotros y actuar a través de nosotros” Se viven tiempos difíciles donde la maldad se aprovecha para saquear y dejarnos desolados por eso la importancia de una espiritualidad centrada en Cristo, único y Sumo Sacerdote del Nuevo Testamento. Dentro de estas dificultades se nos permite una llamada de atención para que nos configuremos a Cristo. Unámonos a esta solemnidad del Corazón de Jesús para que “juntos” podamos seguir los caminos del Dios de la paz, de la justicia y del perdón. Pues en una sociedad dividida y enfrentada por todos los costados es apremiante seguir esta dirección. Que más que simple señalización para tomar unas rutas, es un camino donde él mismo nos acompaña y nos sale al paso, como lo hizo en otro tiempo con los discípulos de Emaús. Necesitamos caminar junto al Señor Jesús y poder ir respondiéndonos muchos interrogantes.
Todas estas preguntas y muchas más, serán respondidas cuando entremos al Corazón amoroso de cristo que se nos ofrece como guía de nuestro caminar. Donde el sacerdote sea un hombre de Dios para sanar y fortalecer a la humanidad. Donde los cristianos seamos más amorosos con la familia y con nuestros semejantes. Para que los obreros, empleados y profesionales más responsables en referencia al honradez y la verdad. Para que todos comprendamos que en Dios todo, sin Dios nada. |
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Dime que te cuento y te diré que aprendes Padre Marcelo Rivas Sánchez Dile no a la Resignación. " G racias a la Pascua del Señor Jesús, hemos nacido de nuevo " para una esperanza viva que no es una " resignación fatalista de quien aguarda algo o a alguien para que le resuelva sus problema" sino que "apunta hacia la plenitud" (Monseñor Mario Moronta, obispo de San Cristóbal)
Mamá usaba mucho la palabra “resignación” pero nunca la ponía en práctica. Pues siempre se revelaba ante cualquier signo de esclavitud, abuso o cosa parecida. Entonces fui al diccionario y encontré lo siguiente:
Será valedera si colocamos en Dios toda nuestra confianza y esperanza. Me pongo en las manos de Dios y me lanzo a la conquista de la vida. “A Dios rogando y con el mazo dando” Pero la otra, es donde mi mamá tenía mucho de queja y demasiado de inconformismo. Pues hemos sido creados para la felicidad y es válida toda la lucha que hagamos, sin dañar a nadie, para conseguir lo añorado. Entonces frente a las adversidades, a la situación del país, de ninguna manera me puedo yo resignar en el cruce de brazos y que la tormenta del comunismo me lleve. No puedo dejar de reconocer que la tolerancia y la paciencia delante de la adversidad son una sana virtud. Pero, yo cristiano bautizado y comprometido con la justicia no me puedo conformar con la adversidad. Creo que hay que luchar y siempre. Incluso si hay que nadar contra corriente habrá que hacerlo para ponernos a salvo. Lo contrario sería entregarse y morir. Esa postura de “dejar y dejar” No te metas en problemas. Es mejor que lo solucionemos más tarde… Trae como consecuencia un quietismo o lo que suelo llamar una indiferencia total que hace extraño al Espíritu Santo en nuestras vidas. Una postura así evita los sueños, las ilusiones, la lucha, el tesón, la constancia, la esperanza y el optimismo. Es como ver morir al mejor amigo y nos atamos de pies y manos para no hacer nada y simplemente lo contemplamos para luego contar a otros que lo vimos morir y punto. No y no a la resignación donde hasta Dios está contento y bendice. No, porque me está impidiendo ser protagonista de mi propia historia. Historia, que en definitiva, será la que debo entregar como cuentas al Dios Creador. No, porque acaricia la idea de un fatalismo anacrónico y desbordante de temor. Pues hasta Dios así lo pensó y así lo realizó. No, porque destruye las iniciativas del mejor esfuerzo y me conformo con lo que hay para hacer más grande la lista de los ciegos conformistas. No porque seca la inventiva y el deseo de superación que está muy dentro de cada uno. Mi madre murió de cáncer y tengo que resignarme a contemplarla en su lecho de dolor, de muerte y no hacer nada más. Como si hoy me tocó a mí mañana a ti. Ya no hago más nada por mi mamá. “el muerto al hoyo y el vivo a bollo” Todo muere. Todo desaparece. Nada queda porque caminante no hay camino, se hace camino al andar… Que triste vida. Que fatalidad. Que cruzarse de brazos y nada más. Todo lo contrario debo comunicar a todas las personas la necesidad que tenemos de curarnos en salud, de animarnos a ir donde el médico para hacernos chequeos y poder obtener un diagnóstico a tiempo, “porque el cáncer es curable si se diagnóstica tiempo” Es verdad mi madre murió, pero no me impide que hable y ayude a otros a superar con las ganas de vivir cualquier enfermedad. Por eso insisto que la esperanza “lo que nunca se debe perder” no consiste en un conformismo o resignación fatalista de quien aguarda algo o a alguien para que le resuelvan sus problema, sino que esta esperanza cristiana nos invita hacia la plenitud. Una plenitud que nos coloca en sintonía con Cristo Jesús que nos da vida nueva en su resurrección. Entonces, cruzarnos de brazos es pecado y bien mortal, porque es no asumir la novedad de la vida La fe cristiana se opone a la resignación. De ahí que necesitemos un corazón inquieto y abierto; sincero y batallador que sabiendo de debilidades sabe superarse y ganarle terreno a la muerte y división. Le digo no a la resignación porque no hace considerar al ser humano como un incapaz de la verdad, como si le quedara muy grande. Para traer una terrible situación, que la estamos viviendo, la incapacidad de distinguir entre el bien y el mal. En la hora actual que vive Venezuela se hace necesario la verdad para ver con ojos reales lo que está sucediendo y no ser “bueyes mudos” o “focas que aplauden” Bien puedo decir, que esa verdad no viene del mero poder externo, sino que procede del poder interior, que no es otra cosa que el amor. Entonces el amor nos lleva la verdad y la verdad nos hace libres. Libres para amar y respetar. Para aceptar escuchando para que nazca el diálogo y no el monólogo que oprime y humilla. Habrá que detenernos para asumir responsabilidades. Enderezar caminos y facilitar que la tolerancia resurja como una fuerza del corazón que añora a Dios y donde está Dios habrá futuro. Por eso el cristianismo no es una lista de leyes, de moralidades y mandatos que agobian. Es más bien un regalo que se mantiene sin conocer ocaso. No somos gallinas acurrucadas llenos de miedo o comprados a precio de baratillo. Aquí no cabe repliegue, mucho menos guapetones de barrio para entrar en pelea. Somos personas, hijos de Dios que en cada amanecer sabemos agradecer y emprender la lucha de todos los días. “El resignado siempre se queja y nunca tiene disposición para la acción” |
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Dime que te cuento y te diré que aprendes Padre Marcelo Rivas Sánchez Pasan los días y las injusticias se repiten. Todos los días son para el chiste, la echadera de broma, la pega, las caídas y toda una enorme cantidad de situaciones propias del trópico latino. Hablando en días pasados con un buen amigo, de esos que saben vivir, quien me decía que una noche se acostó y amaneció gordo. Otro día se quedó dormido y se despertó con una serie de arrugas en la cara. Y que la otra noche se fue a la cama y al despertar se encontró con una averruga. Todo eso durante tres noches. Conclusión estaba cambiando y notando que se ponía viejo, feo y gordo. Ya no somos los mismos, en estos diez años, nos hemos transformado en una bocina que dice y dice, pero que en el fondo nos conformamos con lo que pasa. Todos, de alguna manera y en cualquier sitio, opinamos contra este gobierno. Pero a la hora de las chiquitas nos quedamos como atorados en un fango de miedo y de escrúpulos que nos paralizan. Frente al conjunto de leyes que atrocha y mocha salen de la asamblea permanecemos a la espera. Una espera que puede ser muy peligrosa por la tardía de nuestro actuar. Aquí no cabe la violencia, pero sí la toma de conciencia y el accionar para que a nivel sectorial, comunitario y de vecindario para volver al diálogo y a la verdad. No podemos caer en la zancadilla del enemigo que acecha para matar o destruir. Sino del que está en vela para no ser sorprendido con el alerta de una emergencia frente a un comunismo que quita libertades y suprime los derechos. Cuando uno puede, con tiempo y dedicación, deleitarse con la película que hace posible que se escuche la voz del famoso Charles Chaplin, que lleva por título:”El gran dictador” no puede dejar de pensar que al final de la película se ve uno sorprendido, cuando Charles, en el papel de un barbero judío, con el nombre de Astolfo Hynkel, dictador de Tomania, se lanza con un manifiesto tremendamente emotivo donde expone el error de la guerra y lo terrible que es para las personas estar sometidas bajo la figura de un dictador. Película que sorprende cuando se observa como un comediante del silencio se burla de los que hacen la guerra y motiva a salir de ella. Vale la pena decir que Charles Chaplin al conocer años después lo terrible de los campos de exterminio afirmó que no hubiera realizado la película. Colocó esta película para permitir observar, que nadie tiene derecho a guardar silencio, incluso el comediante de los mimos que tan prestigiosamente lo vivía. Así como es tomado prisionero y por su parecido con el dictador, es obligado a dar ese discurso sobre el inicio de la conquista del mundo. Y hace todo lo contrario: “Lo lamento mucho, pero no quiero ser dictador. No quiero conquistar ni gobernar a nadie. Deseo ayudar a todos, judíos, gentiles, blancos o negros… Nuestra sabiduría nos ha hecho cínicos, nuestra inteligencia nos ha hechos duros y malos. Pensamos demasiado y sentimos poco. Más que maquinaria necesitamos bondad y ternura… ¡Soldados, en nombre de la democracia, unámonos!” Ese es pues lo que les propongo y quiero proponerme a mí mismo. No podemos seguir ignorando por cuatro lochas, por un cargo, por unos privilegios e incluso por disfrutar al lado de otros. Pues dejar pasar tantas injusticias que a la larga se convierten en verdades y de fácil repetición. Termina Charles Chaplin muy aplaudido por la gran multitud y se habla para sí: ¿Me escuchas Hannah? Donde quiera que estés, ¡mira hacia a lo alto, Hannah!” Hannah, en su casa, arrasada de nuevo por los invasores, dirige la mirada al cielo con esperanza, y sobre ese rostro se cierra la pantalla. Guardar silencio sería… Decirle no a la esperanza. Contentarme con vivir sin pensar en los míos que vienen detrás. Adaptarme para luego llorar como cobarde no haber hecho nada. Es el tiempo y las frutas están bajas y maduras. |
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Dime que te cuento y te diré que aprendes Padre Marcelo Rivas Sánchez En medio de tanto dolor Vivimos tiempos muy extraños. Tan extraño que ya no nos extraña tanta muerte. Pareciera que hemos caído en la indiferencia y simplemente cada uno espera su turno a la hora de aquello de que “al que le toca le toca” Pero, no todos piensan así. Creo que todavía quedan muchos que se resisten a vivir tan distantes para convertirse en cómplices. A esos les escribo para animarlos y a los otros para que intenten, por lo menos, por hoy, cambiar de actitud. La Religión tiene su propia libertad que encarna los valores trascendentales, que son los mismos fundamentos de la fe y de la humanidad. Por eso no podemos separar vida y fe, pues en los dos está centrada la gran dignidad de la persona. Entonces cuando se violan sus derechos todo se debilita y cae por una fuerza de tristeza y enfrentamiento. Debemos aprender a vivir y no simplemente tender paños de agua tibia, pues conocer al hombre simplemente por fuera es caer en la ignorancia total. Lo importante es conocerse a sí mismo para alcanzar la sabiduría. A la sazón no podemos escondernos como el avestruz, escondiendo la cara y dejando el cuerpo al descubierto donde se nos ven las costuras. Esto se traduce en una situación muy grave donde en Venezuela hay una inmensa sangría. Mortandad que nos coloca en uno de los países más violentos del mundo. Ante esto nos toca revisar y reflexionar:
Es el momento de detenernos y pensar seriamente acerca de tal situación. No para escudarnos, mucho menos para alegrarnos, sino para buscar salidas o soluciones. Se hace necesario:
Bien lo repetía mi papá Josefino “Quien ha aprendido a sufrir sabe enseñar a otro a vivir” Y es lo que nosotros, de inmediato debíamos iniciar. Pues hay mucho dolor, demasiada tristeza donde vemos con impotencia una técnica dilatoria, de indolencia e incluso de una dejadez por parte de los organismos del gobierno donde, perdonen, pero me parece que nada les importa. Es el momento de colocarnos de frente de tal situación y empezar a hacer algo y de inmediato. Una cruzada para tomar conciencia. Una conciencia que nos una en la oración y la acción. Aquí es un llamado a todos, sin distingos, sin estar buscando más patas al gato. Es una necesidad y punto. Nadie puede se excluido. Aquí no importa por quien votaste o a quien elegiste en los últimos comicios electorales. Aquí es una decisión por la vida y un no por la muerte. No debe haber desánimos, ni mucho menos escondiendo la verdad que a todos nos golpea. No es cuestión de defender a fulano porque me da trabajo para el hijo mayor, pero me expone al menor a la muerte en medio de una violencia que chupa a cualquiera. Debo seguir invitando a todos y nosotros los cristianos que creemos en la vida eterna, no podemos quedarnos en la espera de una vida que dura para siempre, sino más bien una nueva calidad de existencia, plenamente inmersa en el amor de Dios, que libra del mal y de la muerte. “Si no lo hacemos hoy mañana será un cementerio de cobardes” |
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Dime que te cuento y te diré que aprendes Padre Marcelo Rivas Sánchez Silencio en tiempos del Espíritu Santo. “ Concédenos, Dios misericordioso, que la celebración del santo tiempo de la Pascua produzca siempre frutos abundantes en toda nuestra vida ” (colecta misa del 18 de mayo) Frente a la situación tan triste, tan deplorable y hasta conmovedora por la cual atraviesa Venezuela en todos los campos. Pues para nadie es un secreto que tenemos una crisis profunda y muy fuerte en las diferentes columnas que mantienen la sociedad venezolana. Cuando digo crisis me refiero a la familia, a la verdad, a la justicia, a la libertad y a una sociedad que se ha dejado penetrar por lo diabólico del relativismo donde todo “es permitido y nada se puede hacer” Es una situación que comenzó hace muchos años, pero se ha ido agudizando durante estos 10 años donde se ha dejado a un lado los valores, la mística y lo que realmente hace crecer a las personas, para darle prioridad a lo político, a lo popular y a una situación que la podría llamar “Enfrentamiento politiquero y absurdo” Llegó el mesías político y ofreció a diestra y siniestra. Todo parecía que iría “viento en popa” pero a la embarcación le entró agua y nadie o muchos se hicieron los desentendidos y no quisieron achicar. Ahora la barca se hunde y todos se lavan las manos. “Yo voté por él, pero ahora no lo apoyo” “Era una esperanza, pero ahora la puso muy mal” Es entonces, donde se nos viene, un silencio sepulcral y muy peligroso. Silencio que aparecerá en gritos cuando vaya tocando a cada uno. Delincuencia, despidos, pobreza, falta de bienes y servicios, colas y más colas para obtener comida, el arrebato de un familiar por la inseguridad… Ese silencio se rompe y entonces, ya es muy tarde. Cuando a los discípulos les tocó contemplar a su líder, su fundador, su Señor y mesías desde la cruz quedaron muy decepcionados e incluso huyeron. Recordemos que la única era María y Juan al pie de la cruz, los demás corrieron. Era como natural y hasta comprensible esa manera de actuar. Había miedo, había persecución y les falta emoción en sus vidas para entender la verdad de lo que les estaba pasando. Es donde aparece el Espíritu Santo. “ Cuando venga el Consolador, que yo les enviaré a ustedes de parte del Padre, el Espíritu de verdad que procede del Padre, él dará testimonio de mí y ustedes también darán testimonio, pues desde el principio han estado conmigo. (Juan 15,26) Y desde ahí se empieza a obrar un cambio en sus vidas. Un Espíritu que les transforma para que entiendan que no siempre el amor mandará, sino que habrá situaciones de odio, persecución y hasta muerte por causa de Cristo . “Les hablo de estas cosas para que su fe no tropiece. Los expulsarán de las sinagogas y hasta llegará un tiempo, cuando el que les dé muerte creerá dar culto a Dios” Es pues, el Espíritu que les despierta a los discípulos. Nosotros estamos a la espera del Espíritu Santo (31 de mayo, domingo de Pentecostés) Y ese Espíritu nos debe alentar a salir adelante. A buscar soluciones efectivas ante esta crisis. No es un Espíritu simplemente espiritual y angelical, tiene que ser un Espíritu del Resucitado, del que vive entre nosotros y nos anima . No es cualquier espíritu como de esos que vuelan en nuestra cabeza a la hora de buscar una suerte en un número de la lotería. Es el Espíritu Santo, Tercera Persona de Dios Uno y Trino. Ese que llamamos el gran desconocido, pero que lo necesitamos para que convierta este silencio miedoso, cobarde en un grito de esperanza y de tal fuerza que nos cambie y así poder cambiar esta situación que se ha adueñado de nuestras cómodas vidas. “Ven Espíritu Santo” Ven en ayuda nuestra, le necesitamos y con su ayuda seremos libres para actuar en la verdad. Una verdad que hará aparecer la justicia y al aparecer llegará la paz que tanto deseamos. “Ven Espíritu Santo” Ven pronto que te esperamos. Vivimos esclavos de un silencio que nos hace daño olvidando que en el silencio manda una complicidad que permite que el mal se extienda y tome cuerpo. “Ven Espíritu Santo” Ven a nuestras vidas rompiendo el silencio cobarde que está sepultando nuestras mejores aspiraciones y sembrando de odios nuestras vidas. “Ven Espíritu Santo” Ven que estamos ansiosos de conocer tu fuego y fuerza para desterrar de nuestras vidas todo lo que nos divide y nos separa de familia, de comunidad, de sociedad y de responsabilidad por un mañana mejor. “Ven Espíritu Santo” Rompe estas cadenas que nos atan y no nos dejan manejar en un camino recto y próspero para llegar al puerto seguro, que junto a la Virgen María, en este mes de mayo, le dedicamos nuestras vidas en oración con el santo rosario. “Ven Espíritu Santo” Ven no tardes tanto. Ven a despertarnos y quítanos este abatimiento que produce modorra y conformismo. |
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Dime que te cuento y te diré que aprendes Padre Marcelo Rivas Sánchez Mes de la Virgen María. Mes del Santo Rosario
Ya es la hora de que todos se enteren que no es una moda, mucho menos un rezo ante la fría muerte de un familiar o de un cercano. Es una oración de verdad, verdad y que está gustando de manera muy especial entre los jóvenes. Ayer, con el exquisito gusto de un buen devoto al santo rosario, recibí un correo electrónico donde se me presentaba un video muy fabuloso y de profundo mensaje ante el rezo del Santo Rosario. Lo puedes encontrar en la siguiente dirección: www.belomasan.com De inmediato recordé a mi madre (Edilia) quien me lo enseñó y me regaló la gracia de amarlo. En ese video se observa a un joven que ha terminado de rezar el rosario y se dispone a buscar la ropa que se había secado. Y allí comienza una serie de escritos en la pantalla mientras él escribe algo en una franela, playera de color blanco. Los escritos van señalando realidades ante la costumbre sana de rezar el rosario: Muchos no me entienden, pues hay otros que eso de rezar es algo de gente rara. Dicen que es aburrido, tan aburrido que nos parece algo fuera de lo natural; Que siempre digo lo mismo, como si repetir el plato exquisito sería un daño o respirar el mismo aire nos contaminaría. Que así no ayudo a nadie, como si el rezar no tuviera un efecto impresionante en nuestro avanzar. Que está pasado da moda, cómo si la moda no se recordará a cada instante. Que ya nadie lo hace, pues si usted no lo hace eso no significa que otros no lo puedan hacer. Que no sirve para nada, como el hacer es tan igual al cruzarse de brazos y esperar. Que no tiene sentido , entonces tiene sentido lo malo y lo que no construye. Que estoy perdiendo el tiempo , más perdido estaría si no hago algo por los demás… Todo esto nos lleva a reflexionar de la importancia del Santo Rosario como una oración a Dios en acción de gracias por su Madre y Madre nuestra que nos prestó su vientre para que naciese la salvación del mundo. El Video continúa con una afirmación de gran contenido valorativo delante de la necesidad de orar con el rosario. Sin embargo, un buen amigo me dijo una vez: no tengas miedo y ten siempre presente que no estás solo. ¡Yo rezo el rosario! Para finalizar el video demuestra que no se está solo, que hay muchos más que si rezan y buscan en María una hermosa compañía de amor y paz. Por eso en aquella franela, playera el joven había escrito: Yo rezo el rosario y al caminar por las calles anunciando esto, salen otros más con escritos parecidos a favor del rosario. Mes de Mayo mes de María, mes del santo rosario. Mes que nos abre una gran puerta que si la abrimos nunca se volverá a cerrar. Vale la pena, con afirmación de cristiano, rezar no para repetir, sino para sentir que Ella, la llena de Gracia significa mucho para la humanidad y para cada uno que en este valle de lágrimas avanza. Modo de rezar el Santo Rosario 1. Hacer el signo de la cruz y rezar el credo (símbolo de los apóstoles) el acto de contrición . Te invito con alegría cristiana a rezarlo y ha vivirlo. Pues Dios se hizo humanidad en un vientre de una madre que prestó todo lo de Ella para traer, amamantar y cuidar a Jesús, verdadero Dios, verdadero hombre. Que la Virgen del Valle en este mes de Mayo le bendiga siempre. |
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Dime que te cuento y te diré que aprendes Padre Marcelo Rivas Sánchez Me resisto a vivir en tales situaciones La vida, ciertamente, que es una lucha y al final los vencedores serán los que supieron luchar y avanzar. Pero hoy en día pareciera que este avanzar se encuentra con nuevos y más obstáculos. Todo es un problema: para comprar, para buscar, para sacar el pasaporte, para ir y venir, para opinar, para decir o encontrar la verdad. No es que antes todo era tan fácil, pero si había cierta facilidad y espacio. La gente oía y la gente ejecutaba. Hoy, hay que esperar que el de arriba diga y ordene de resto nada se mueve o nada camina. En estos días el gobernador se encadenó para insultar, amenazar y ofrecer cárcel y se dará un gusto cerrando una emisora y metiendo preso a fulano y zutano. Yo me decía: pero porque no se encadena para decirnos que vamos a hacer con tanta delincuencia y tanta tristeza en este estado que cada día es más pobre. Yo no me acostumbro a vivir y ver así a un gobernante que se cree gallo fino y que se olvida que tiene a su sombra su pasado. Me parece que ha sido elegido para gobernar, encaminar y buscar soluciones para todos. No para amedrentar e insultar. Ojalá, tenga esa fuerza para reclamar al centralismo los recursos propios de Sucre y así sacarlo de esta miseria en que vive. Debe haber una resistencia ante esto. No es una resistencia a molestar por molestar o criticar por criticar. Es una resistencia que no nos deje llegar a la desesperación porque deja de ser resistencia y se convertiría en guerra, enfrentamiento y lucha de unos contra otros. La resistencia es no acostumbrarse a vivir de tal manera donde todo me rueda, nada me importa; ese no es mi problema, que lo solucionen otros. Me recuerda aquella hermosa historia de la trampa para cazar ratones. Una tarde llegó el empleado del servicio de entrega de paquetes a domicilio a la casa de la señora Juana. En la caja se veía y se leía “una trampa para cazar ratones” El pequeño ratón asustado corrió donde la vaca y le comunicó la llegada de la trampa. La vaca le respondió: que no era su problema, que el problema era del ratón pues ahí caería solamente su pequeña humanidad. También fue donde el cochino y le dio a conocer tal noticia. El cochino muy preocupado por su chiquero donde se revolcaba le respondió: caramba ratón ese es tu problema, busca la manera de refugiarse. El ratón todo asustado fue y se internó en su agujero. Por la noche la señora Juana instaló la trampa y se acostó con la seguridad que esa noche caería el ratón. Ya entrada la noche se escuchó el sonido fuerte de la trampa. De seguro, había atrapado al fastidioso ratón. La señora salió corriendo para observar su casería y en aquella oscuridad la trampa había atrapado la cola de una venenosa serpiente. Que al ver a la señora enseguida la mordió en el talón. La señora gritó y todos los de la casa fueron en su auxilio. De inmediato al hospital, claro un hospital abandonado no tenía el debido tratamiento y la señora murió. Para la noche del velorio el hijo a su padre le comentó: ¿papá hay mucha gente que le daremos de comer? El papá le respondió: manda a matar el cochino y sírvelo a la gente. Así que mataron al cochino y todos saborearon su rica carne. Pasados los nueve días se juntó mucha más gente para orar por la difunta y ante la pregunta: ¿Qué le damos a la gente de comida? El padre mandó a matar la vaca para dar de comer a todos. Así terminó esta historia donde por una trampa de ratones fueron sacrificados vaca y cochino. Así está pasando en Venezuela. Nadie se preocupa por lo que pasa. Nadie se escandaliza de lo que sucede. Y el tiempo pasa y la gente se acostumbra a vivir en silencio cómplice de una sociedad que se mata. Yo, entonces, me resisto y así no quisiera vivir. Me rebelo y pido a Dios que me siga dando conciencia de libertad y participación. Pues vivir en silencio dejando pasar las situaciones no es vivir es morir entre las sombras de la rabia y el escándalo. No te acostumbres al centralismo donde el dedo de uno decide por todos. No te acostumbres a permitir que tu elección sea desconocida cuando pasan por encima de un alcalde soberanamente elegido y ahora su presencia no tiene sentido. No te acostumbres a ver un poder moral silencioso y dispuesto a defender al gobierno de turno como si en nada se equivocara. No te acostumbres a ver los cuerpos policiales llenos de corruptela y desviaciones mientras los delincuentes gozan de libre ejercicio de sus maldades. No te acostumbres a comer lo que ellos decidan o quieren vender, mientras ellos no compran, ni consumen lo que quieren que nosotros comamos. No y no. La resistencia no es enfrentamiento o rabia. Es una necesidad para no acostumbrase a vivir a medias o alejado de la realidad. Despierta y reacciona. Es el momento. Venezuela no es de ellos. Será de todos, si todos la defendemos. |
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Dime que te cuento y te diré que aprendes Padre Marcelo Rivas Sánchez Bienvenidos jóvenes misioneros de toda Venezuela Hoy al darles la bienvenida a 500 jóvenes de toda Venezuela que toman a Cumaná como sede para el IV Congreso Nacional Juvenil Misionero “CONAJUMI 2009” y tiene por objetivo renovar, reafirmar y celebrar el llamado, la conciencia y el compromiso bautismal en los jóvenes venezolanos, para dar respuesta a los grandes retos de la misión Ad Gentes, desde nuestra propia realidad. Es propicia la ocasión para que tomemos partido en ese llamado que nos hace Dios a cada uno. Dios se ha fijado en cada uno y nos ha enviado: “Remen mar a dentro” El remar es atreverse y el mar es el mundo que nos espera. La sociedad que tiene deseos de conocer el mensaje de Dios en esta hora tan menguada y triste por la cual atraviesa Venezuela. Bien vale la pena repetir la invitación que nos hacía el papa Juan Pablo II al visitar a nuestra patria: “Despierta y Reacciona. Es el momento” Llamado que hoy en día se hace necesario por la lejanía en que nos encontramos los venezolanos. Cada día más rejas, más cemento, más obstáculos nos separan unos de otros. La vida se hace cada día más superficial en las relaciones y las respuestas como hermanos que debíamos ser. Por eso estos jóvenes, representan una gran esperanza: Esperanza centrada en un Dios que no se olvida de todos. De un Dios que sale al encuentro con la fuerza de jóvenes que aprendieron a conocerle, a amarle y a dar lo mejor de sus vidas para el servicio del encuentro con la sociedad y las familias. Por eso, ellos, sangre nueva y comprometida nos hablan para decirnos: Todo lo podemos en Cristo que nos conforta (Filipenses 4,12-14) Ellos han comprendido que para San Pablo este era su secreto. Con Jesús muy unido a su vida podía desarrollar y hacer todo realidad. A nada tenía miedo y todo lo podía soportar. Estos jóvenes nos hablan de una verdadera libertad. Muy diferente al libertinaje de deshacer y destruir. Es una visión del concepto natural de la libertad en función del bien y con un no a lo malo. En cada uno de estos jóvenes hay un grito de mucha esperanza y fuerza: No vivimos encasillados ni presos de seguridades y esquemas. En ellos hay una forma sagrada de vivir para el servicio de los demás. Todos, sin excepción, estamos llamados a vivir de esta forma. Claro cada uno de nosotros sabemos que somos limitados y que nos persigue la flaqueza de la carne y como agujón nos hiere por todas partes. Débiles e incapaces. Pero, ¡que esto no sea una excusa para abandonar nuestra misión! Con la fuerza de Dios lo podemos todo. Un cristiano es una persona libre, que sabe adaptarse a las circunstancias. Sabe convivir entre ricos y pobres, sabe tener bienes sin apegarse a ellos y sabe ser pobre sin angustiarse. Su único tesoro es Dios. Que lindo. Que maravilloso que estén entre nosotros. Son una bendición y un regalo de Dios. Pues es Dios que en esta pascua de Resurrección nos invita a renovarnos, a ser diferentes para estar despiertos y así poder responderle. De una cosa debemos estar seguros. Nada sin Dios se logra. Todo con Dios se consigue. Es el mismo Dios que dirige nuestros pasos y nos hace caminar en la luz de nuestras propias obras. Dios va a devolver el ciento por el uno. Nuestra generosidad siempre será compensada. Ese esfuerzo al abrirle las puertas de nuestros hogares a jóvenes de compromiso y vida de servicio se verá recompensado. Dios responde con esplendidez. Dice el Papa en su libro Jesús de Nazaret que lo propio de Dios es el derroche, la sobreabundancia, la magnificencia. Sí, nuestro Padre del cielo da a manos llenas. Por eso ser generoso es otro distintivo de aquellos que se sienten hijos amados de Dios. Queridos jóvenes, al darles la bienvenida en nombre de la Iglesia de Cumaná, les invitamos a hacer de este encuentro, la más bella experiencia de un Dios que abre camino en un pueblo que desde Macuro se abrió a las misiones y se conformó como Iglesia peregrina en búsqueda de lo mejor. Entonces, han venido a fortalecer su respuesta al llamado de Dios para vivir la vida nueva que Él nos ha dado. Pues Dios quiere vivir en ustedes la mejor experiencia en la salvación para que todos tengan vida y la tengan en abundancia. Han venido para decirnos que Cristo está vivo y es joven. Pues lo que caracteriza la fe cristiana, a diferencia de todas las otras religiones, es la certeza de que el hombre Jesús de Nazaret es el Hijo de Dios, la Palabra hecha carne, la segunda persona de la Trinidad que ha venido al mundo. Esta es la alegre convicción de la Iglesia desde sus comienzos. Bien vivido y enseñado por la Santísima Virgen que en su vientre generoso le recibe y le alimenta. Han venido para llenarnos de sus energías y señalarnos el mejor camino a la convivencia y el crecimiento espiritual. En ustedes está una fuerza capaz de unirnos y hacer posible una marcha que no tiene retorno. Han venido para decirnos que Dios nos e quedó clavado en la cruz del dolor, sino que la bendijo con su amor y salvación. Pues desde esa cruz nos rescató y ahora nos permite recibirlos para aprender juntos que la vida cristiana tiene comienzos, pasos, caminos, señalizaciones, senderos y sobre todo un misterio que se va conociendo a la medida que nos conozcamos y juntos avancemos. Han venido para recodarnos los inmensos favores recibidos de Dios. Favores observados, más no contemplados, en las montañas, en los paisajes de mar y cielo. Entonces, gracias y que su estadía nos sirva para renovarnos. Que Dios les bendiga siempre en el amor de la Virgen de Altagracia patrona de la Arquidiócesis. |
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Dime que te cuento y te diré que aprendes Padre Marcelo Rivas Sánchez Ante la injusticia La injusticia, siempre mala, es horrible ejercida contra un desdichado . (Concepción Arenal 1820-1893 Escritora y socióloga española. ) Frente a loa injusticia que sucede a diario uno queda con la boca abierta. No esperando las babas de uno que se queda cruzado de brazos. Que va. Es abierta ante lo descarado y abusivo. Es como ir haciendo un traje a su medida para colocárselo cuando le convenga. Esa injusticia tiene su raíz en el día en que “muchos” decidimos no estar de acuerdo, es decir tener el derecho de disentir y para ello el revocatorio, las elecciones, las manifestaciones, las huelgas y todo lo que exprese libertad. Pero no una liberta donde me dejan hablar, pero cuando voy a solicitar un derecho se me niega o vaya a protestar y me dejen pero ellos deciden hasta donde debo caminar y por cual calle. Eso no es libertad, eso es abuso y falsa libertad. Cada día observamos a gente muy decepcionada, a tal punto, que vaga y vive como en un país de puras mentiras. Una revolución y en nada se diferencia a los gobernantes anteriores, al contrario, los supera en corrupción y engaños. Uno estudia y llega a graduarse y no consigue trabajo y si lo consigue tiene que pasar por unos filtros, donde el uso de tu libertad para revocar es tan mal visto que te niegan el empleo. Eso es y seguirá siendo injusticia. Vivir en una ciudad donde todos se conocen y se comparten las luchas y los triunfos y de la noche a la mañana unos son aplaudidos y otros arrinconados; unos salvadores y los otros golpistas; unos los últimos refrescos del desierto que calmarán la sed para siempre y otros lo peor e imperialistas, vende patria y sin futuro. Y eso es injusticia. El hombre honrado, sano y de buen vivir no puede traficar por las calles. Las calles tienen dueño “la delincuencia” y si uno tiene que vérselas con ellos, que desgracia, hay que irse de la ciudad o pasar un tiempo en la cárcel o lo que es peor entregar la vida como sacrificio a lo que siempre será injusticia. Todo esto sigue sucediendo bajo el silencio cómplice de las autoridades, que pareciera que a ellos les conviene como si fuera concretado un pacto con las aseguradoras o las pompas fúnebres. Una injusticia es muy dura para quien la padece y para quien la conoce. Deja profundas heridas y que da poco espacio para el perdón. Cosa que se agrava cuando desde lo más altos niveles se propicia y se apoya. La injusticia se hace camino cuando se pone a andar en una serie de mentiras que repetidas tienden a ser creídas. Este avance produce desesperación y hace que la persona agredida caiga en una profunda crisis donde un odio profundo quiere imponérsele que es difícilmente superable. La injusticia, allí donde se halle, es una amenaza para la Justicia en su conjunto (Martín Luther King, 1929-1968 Religioso estadounidense) Quisiera hablarles como cristiano, muy convencido, de que el camino del mal es peor que la propia injusticia. Camino del mal sería la venganza o tomar senderos de otra índole. Creo que hay que buscar la paz y el perdón, más que el silencio o el cruzarse de brazos esperando que pase la tormenta. Con esto no quiero invitar a la pasividad o al desánimo, todo lo contrario, yo te perdono, pero es una injusticia y como tal la tengo que combatir. Hay que vencer el mal con el bien. El cristiano sabe que toda la injusticia humana, todo el mal de nuestro mundo, ya ha sido vencido. En la Cruz de Cristo, en el momento del máximo pecado, de la traición y cobardía de los hombres, las palabras del perdón llegan lejos, llegan dentro, llegan fuerte: “Padre, ¡perdónales!” Entonces una manera de vencer las injusticias es dejar a un lado las rencillas y esto nos traerá mucho esfuerzo, demasiadas críticas e interpretaciones maliciosas. Entonces, el perdón se hace necesario e imperante frente a la injusticia que opera con garras diabólicas y que dentro de ayuno, oración y mucho sacrificio. Sin olvidar que no podemos quedarnos como bueyes mudos, tenemos que ser solidarios. Una solidaridad necesaria para ayudarnos unos a los otros. Pues el sentir la injusticia es motivo de dolor, pero soportarla en soledad con la ausencia de gente consciente es mucho más dolorosa y tristemente observada en la Venezuela de hoy. “Permitir una injusticia significa abrir el camino a todas las que siguen” (Willy Brandt. Político alemán. ) Cristo padeció la peor injusticia. Esa injusticia lo llevó a la cruz. Una cruz que nunca fue maldita, más bien lugar para la redención. Hoy le pedimos a Dios, Todopoderoso, que nos de la gracia de ser justos y que no permita que nos convirtamos en cómplices de injusticias. Más bien constructores de la paz en una sociedad de justos, que tanto hace falta a nuestra querida tierra. Amén. |
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Dime que te cuento y te diré que aprendes Padre Marcelo Rivas Sánchez « Resurrectio Domini, spes nostra », «la resurrección del Señor es nuestra esperanza» (San Agustín) La Pascua es un sí “firme” por la vida Recordándonos que la resurrección del Señor es nuestra esperanza, pensamiento de San Agustín, iniciaba el Papa Benedicto XVI al saludo URBI ET ORBI para la Pascua 2009. Saludo cargado del amor de un padre para con sus hijos. Nosotros siempre nos estaremos preguntando: ¿qué hay después de la muerte? Y en esta solemnidad, continúa el Papa, nos permite responder a este enigma afirmando que la muerte no tiene la última palabra, porque al final es la Vida la que triunfa. De esa vida es la que les quiero hablar en este instante de lectura y reflexión. Pues somos muchos los que hemos visto la semana santa como una oportunidad para las ventas; otros momento para el descanso y el disfrute. Y así sucesivamente muchos y muchas. Pero lo importante no se queda en lo material, sino que hay que valorar lo que somos y tenemos delante de Dios, de la familia y de nosotros mismos. El Papa insistía. Si, por la Pascua, Cristo ha extirpado la raíz del mal, necesita sin no obstante hombres y mujeres que lo ayuden siempre y en todo lugar a afianzar su victoria con sus mismas armas: las armas de la justicia y de la verdad, de la misericordia, del perdón y del amor. Mensaje muy claro para estos días. No es la venganza (30 años de prisión para los policías. Condena nunca vista en Venezuela) No es el paso de factura para los que piensan diferente al gobierno. Mucho menos quedarnos en gritar consignas que llamen a la muerte y vivir a costillas de los pobres. Es la vida la que manda. Pero una vida sin dignidad, sin amor no es vida es esclavitud, engaño y lugar para el abuso y el desorden. Bien se refería el Papa a los pueblos africanos que visitó y alentó y motivó su visita a Tierra Santa con un llamado a la paz y el perdón. La vida necesita del perdón. Sin el perdón deja de ser vida y se coloca al lado de los que atropellan y aprovechando la autoridad someten y humillan. Cristo se les aparece a los discípulos encerrados por miedo para decirles: "Yo soy el que vive; estuve muerto, pero ahora vivo para siempre" Hoy, nos debe sorprender este viviente, pues nos grita vida y defensa. Vida para vivirla y dejarla vivir y defensa pues la sangre está llegando al río. Son muchos los que han muerto por la inseguridad, por la falta de amor, por la falta de concordia y de paz. Necesitamos vivir pero en el callejón se esconde la muerte de la bala asesina, del malandro dañino y del vicioso que mata parta seguir consumiendo. De esa tragedia diaria tenemos que caminar con el corazón en la mano y la sangre a punto de saltar. Esa vida se ve lesionada por situaciones muy duras y casi inexplicables.
Es muy triste y demasiado penoso vivir así. Vivir para odiar. Vivir para venganza. Vivir en isla y tratando de aparentar no es vida. De ahí que nos corresponda elevar un clamor primeramente hacia el cielo, hacia Jesucristo vivo, para que abra las mentes y corazones de los hombres al valor de toda vida desde la concepción hasta la muerte. También el clamor va dirigido para que conceda a la humanidad la conciencia clara y firme de ser administradores, no señores, de la vida. Es un clamor que debe ser escuchado por las instituciones estadales y públicas para que defiendan con vigor y con constancia todas las formas de vida humana. Sin dejar, creo lo más importante, que resuene dentro del corazón de todos para que, a pesar de tanta violencia y tanto asesinato, nunca decaiga el valor primordial de la existencia, la dignidad de toda vida humana. “Señor, Dios, Todopoderoso y eterno, que sintamos la vida como una gracia, que se hace tarea y una meta por conquistar. Dichoso quien sabe apurar la vida hasta el final, amando gozosamente a Dios y a los hombres” |
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Dime que te cuento y te diré que aprendes Padre Marcelo Rivas Sánchez Semana Santa 2009 Para los que tengan que viajar El viaje más largo es Hacia el fondo de tu corazón. El Señor nos invita a todos, sin excepción, a participar y formar una sola familia, una sola comunidad, un solo pueblo de Dios. Pero como algunos tienen que ausentarse y para que no queden marginados de nuestros Actos Religiosos y de nuestra Comunidad con el Señor le proponemos lo siguiente: 1. Jueves Santo. Solemnidad de la Cena del Señor. Al atardecer, en el lugar que te encuentres, te juntas con otra persona. Sentados en una mesa con una imagen del Señor Jesús y una vela, un poco de pan y vino (u otra bebida) Todo en recuerdo de la Cena del Señor. Se lee 1 de Corintios 11,23-26. (Qué les dice la lectura). Se hace un pequeño comentario. Se reza por toda la comunidad. Se pide por todos y tomados de la mano se reza el Padrenuestro. Se termina compartiendo el pan y el vino. Hay todo un mundo por descubrir, pero no está fuera está dentro de ti y es increíble la de cosas que puedes descubrir.
2. Viernes Santo. Pasión del Señor. A eso de las tres de la tarde te juntas con otro delante de una cruz. Se lee el salmo 30 “Padre, en tus manos encomiendo mi espíritu” (Qué les dice la lectura) Se pide por la paz de Venezuela y de toda la comunidad. Se reza un credo, el Padrenuestro y se dan un abrazo de paz y de acompañamiento. Viajar es ver la situación de los demás.
3. Sábado Santo. Vigilia Pascual Soledad de la Santísima Virgen María. Nos juntamos con otro delante de la una imagen de la Virgen. Se lee Se rezan tres avemarías pidiendo por todas las madres del mundo. Además, de invitar a los demás a saber esperar la Resurrección de Jesús en cada uno de los corazones como lo esperó la Santísima Virgen. 4. Domingo de Resurrección. “Nuestro Señor, no está aquí, ha resucitado” Nos sentamos y dejamos una silla vacía. Leemos Evangelio de Juan 20,1-9 (Qué les dice la lectura) Cerramos los ojos y nos imaginamos que Cristo llega y se sienta a nuestro lado (silla vacía) El nos dice “Me quedo con Usted (s)” Nos da un abrazo, su paz a cada uno, nos llena de su amor, esperanzas y energías. Nos colocamos de pie rezamos el Avemaría, Padrenuestro y le damos la bendición a toda la comunidad. Cantamos aleluya. Que tengas un buen regreso Felicidades de Pascua y Resurrección. Parroquia Santa Ana |
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Dime que te cuento y te diré que aprendes Padre Marcelo Rivas Sánchez A SOLAS CON EL NAZARENO DE SANTA INES Ayer a eso de las 12 y media me colé por unos de los agujeros de un rincón de las paredes de Santa Inés y estuve conversando con el Nazareno. Se sorprendió al verme, pues siempre está muy solo y especialmente a esa hora. Fue tal la sorpresa que al principio me miraba y no me decía media palabra, pero cuando le hable de su salida para presidir el Vía crucis del próximo 3 de abril se abrió al dialogo y enseguida entremos en amena conversación. ¿Está contento de salir a caminar con tu gente? Claro, ellos siempre viene para acá, es bueno que yo vaya donde ellos. Además, todo Nazareno debe salir y no necesariamente para los días santos. Creo, como cosa muy particular, que ha Cumaná le hace falta verme por sus calles. Son en ellas donde desfilan muchos nazarenos llenos de dolor y amargura. De seguro, mi presencia, les animará a tenderles la mano y a no ser tan indiferentes. ¿Pero, cómo despertar la fe en las personas que cierran la mano y hacen la vista gorda ante tantos sufrientes? Yo no quiere condenar a ninguno, mucho menos obligar a nadie para que piense, “seriamente” en los que sufren y padecen la pobreza. Pues la pobreza se impondrá, tarde que temprano, si nos hacemos los indiferentes delante del dolor y la tragedia. Una tragedia que está en los niños abandonados que viven si amor y respeto; en los jóvenes caídos en la drogadicción; en los adultos entregados al alcohol; en muchos que malgastan la vida en el juego, la critica, la envidia y la destrucción para con los demás. Cuando digo se impondrá la pobreza y la tragedia es en referencia que todos somos caminantes de la misma calzada y tarde o temprano a cualquiera nos puede ocurrir. Nadie está exento de este mal. A todos, en cualquier punto de nuestra vida, nos puede ocurrir. Creo, que era tu mamá la que decía: “guarde para cuando haya leche” Entonces, ¿caminar es un reto para el Nazareno? Más que un reto, una necesidad. Es una necesidad porque afuera están los que realmente necesitan. Los que claman y no son escuchados y atendidos. Es afuera, en ese mundo, muchas veces convulsionado, enfrentado, enredado y por lo general en dirección contraria al amor de Dios, que necesita de mi amor y bendición. Se impone, entonces, el que tenga que salir a buscarlos, pues andan muy ocupados en la vanidad de la vida y se olvidan que mañana en un abrir de ojos pueden quedarse dormidos para siempre. ¿Oye, Nazareno, me estás metiendo miedo? Nada de eso. Con miedo no se llega a ninguna parte. El miedo paraliza y aleja los mejores pensamientos. Nada de miedo. Nada de cobardías hay que salir, buscarlos y promoverlos. A unos para que cambien de vida y dejen esa situación de tristeza y pecado; a los otros, para que ayuden y promueven acciones para mejorar y ser cada día más solidarios y hermanos. Ese salir empuja a todos y hace que todos se sientan mejores para cambiar a una vida mejor y hacer que el otro alcance su alegría en la vida. Cuando iba a preguntarle otra vez, amaneció y apareció el Señor Arzobispo para celebrar la misa de las primeras horas de la mañana y me escondí entre las columnas para luego salir confundido entre los fieles que madrugan para alabar a Dios. Después de esta experiencia estuve caminando por las calles y observé que hay mucha pobreza, que hay muchos indigentes, que existen muchos que necesitan de mi mano amiga y organizada. Contemplé por un rato la fachada del comedor de Catedral y me dije: aquí comen muchos. Aquí hay una ventana para organizar algo bien lindo. Dí gracias a Dios y llamé al Padre Henry Duque para felicitarlo y ponerme a la orden. Sabía que el tiempo es obra de Dios para ayudarnos con las mejores ideas. Es en este tiempo que nos necesita Dios, para mañana es tarde. |
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Dime que te cuento y te diré que aprendes Padre Marcelo Rivas Sánchez En un Vía Crucis para amar más a Dios en cada uno de los hermanos.
Dentro de la programación de la Semana Santa, la Arquidiócesis ha organizado un Vía Crucis temático en movimiento y de un profundo sentido social. Se realizará este 3 de abril, a la 4 de la tarde, saliendo desde la capilla del Hospital Central con la presencia silenciosa y reveladora en su amor del Nazareno de Santa Inés. Su finalización será en el templo de Santa Rosa. Todas las parroquias de la ciudad tendrán su participación e irán haciendo una reflexión destacando la grave crisis de valores que aquejan a nuestra sociedad y de forma muy especial a nuestros jóvenes. La dirección del Vía Crucis estará a cargo de los Presbíteros Lindorfo Marín Y Carlos Mendoza. Quienes de forma unificada han preparado un recorrido en conjunción con el Padre de Santa Rosa Raúl Urea. Este acto espiritual lleva como tinte invitar a todos a prepararse para contemplar a Cristo en su vida, pasión, muerte y resurrección. Contenido esencial de la Semana Santa. Además, de dar un toque y una llamada de atención delante del quehacer nuestro. Pues, muchas veces, andamos como indiferentes, apagados y casi sin darnos cuenta de una semana para la vida en Cristo Jesús. Vía Crucis en latín o "Camino de la Cruz" También se le llama Estaciones de la Cruz y Vía Dolorosa. Es un camino de mucha oración – meditación que busca adentrarnos en la redención de Cristo Jesús que avanza penosamente hacia el calvario. En este camino se van desarrollando incidentes particulares que Jesús sufrió por nuestra salvación. Cómo todo camino hay que recorrerlo para saber y vivir su contenido para unirnos a Nuestro Señor, quien vive, muere y resucita por todos nosotros. Como lo señalé, la Iglesia en Cumaná intentará hacernos reflexionar sobre la realidad por la cual atraviesan muchas personas, especialmente jóvenes, delante de los valores. Unos valores que han caído, al igual que Cristo por el peso de la cruz, en la drogadicción, el alcoholismo, la calle, la vagancia, la delincuencia, el huir de la familia, el embarazo precoz… que han llevado a muchas familias a vivir un verdadero vía crucis de dolor y amargura. Entonces, hacer el Vía crucis, es dejarse penetrar por una realidad social que nos afecta a todos y desde la oración la queremos contemplar y reflexionar para buscar soluciones, encuentros y formas que no se quedarán en simples lamentaciones so resignaciones que en nada son posturas cristianas. Despertar es una de las finalidades del recorrido de la cruz por calles, avenidas y veredas. Despertar significa sentirse motivados a hacer algo por quienes hoy están sumidos en una “derrota” pero, con al gracia de Dios y nuestro accionar, pueden salir adelante. Es decir, se pueden levantar y comenzar una nueva vida. Vayamos, este 3 de abril, 4 de la tarde, desde la capilla del hospital con ánimo respetuoso por el que se encuentra sometido por el dolor de un vicio o de una vida contraria a la dignidad de cada persona para sentirnos solidarios, hermanos y de forma muy especial, verdaderos cristianos que salen al encuentro de los más alejados. En camino vamos todos. Todos hacemos el camino compartiendo pan y situaciones. Desde el camino nos encontramos con el mejor de los caminantes “Cristo Jesús” |
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Dime que te cuento y te diré que aprendes Padre Marcelo Rivas Sánchez “Para el padre Jesús Lezama, que juntos, el 29 de julio de este año, cumpliremos 25 años de vida sacerdotal” UN AÑO JUBILAR SACERDOTAL Aunque sea difícil el tener que hablar de uno mismo, me quiero apoyar en el Padre Jesús Manuel Lezama Tineo que junto a mí cumpliremos, el próximo 29 de Julio, día de Santa Marta, 25 años de vida sacerdotal. Celebración que estará enmarcada en la oración y en un movimiento para incrementar las vocaciones sacerdotales en nuestra Iglesia local de la Arquidiócesis. Pero, lo más lindo, es que Su Santidad Benedicto XVI en nombre del sacerdocio, de manera hermosa y llena de amor a su sacerdocio en el ministerio tan santamente llevado por San Juan Bautista María Vianey, el Santo Cura de Ars, ha querido dedicar este año, a partir del 19 de Junio, Año Jubilar para sacerdotes o Año Sacerdotal. Con el lema “Fidelidad de Cristo, fidelidad del sacerdote” Padre Jesús la pegamos. Cómo que el Papa se une a nuestra fiesta y sabe agradecer a Dios tan bello regalo que sin méritos hemos recibido. Es que el Papa en el recuerdo de los 150 años del fallecimiento del Santo Cura de Ars, quien dejara para nuestros días ejemplo de vida y de amor a Dios en el ejercicio de su ministerio sacerdotal. Al hacer mención del Santo Cura de Ars tengo que decirles, mis queridos lectores, que Juan María Vianney nació cerca de Lyon el año 1786. Tuvo que superar muchas dificultades para llegar por fin a ordenarse sacerdote. Se le confió la parroquia de Ars, en la diócesis de Belley, y el santo, con una activa predicación, con la mortificación, la oración y la caridad, la gobernó, y promovió de un modo admirable su adelanto espiritual. Estaba dotado de unas cualidades extraordinarias como confesor, lo cual hacía que los fieles acudiesen a él de todas partes, para escuchar sus santos consejos. Murió el año 1859. Cabe recordar que para el 15 de agosto del año 1815 logró ser ordenado y repetía con frecuencia: “ "El Sacerdote solo será entendido en el cielo"; tenía 29 años de edad. Es hermoso, también, tener muy presente cuando fue enviado a Ars de 40 casas donde el templo estaba completamente destruido y la gente muy alejada de Dios. Permaneció por 41 años y allí llegó caminando los 38 kilómetros y desde lo lejos mirando al pueblo dijo, lo que luego sería su gran profecía: "La parroquia no será capaz de contener a las multitudes que vendrán hacia aquí" predicaba recio y oraba en silencio. La gente era sorda y Dios oía perfectamente. Toda su obra fue hermosa, pero la mayor su entrega a la confesión y al cuidado de los niños. Antes de morir pudo decir con alegría y gran libertad: "Qué bueno es Dios; cuando ya nosotros no podemos ir más hacia El, El viene a nosotros" Su cuerpo permanece incorrupto en la iglesia de Ars . El 8 de Enero de 1905, el Papa Pío X, Beatificó al Cura de Ars; y en la fiesta de Pentecostés Mayo 31 de 1925, en presencia de una gran multitud, el Papa Pío XI pronunció la solemne sentencia: "Nosotros declaramos a Juan María Bautista Vianney que sea santo y sea inscrito en el catálogo de los santos" Entonces, padre Jesús estaremos con una gran fiesta de acción de gracias y junto a nosotros toda la Iglesia, ya que el Papa abrirá las celebraciones con el rezo de las vísperas en la solemnidad del Sagrado0 Corazón de Jesús y Jornada de Santificación sacerdotal con al presencia de la reliquia de Vianney que será llevada a Roma por el obispo de Belley-Ars. Para que se clausure el 19 de junio de 2010 durante un "Encuentro Mundial de Sacerdotes" en la Plaza de San Pedro del Vaticano. Durante el año jubilar el papa proclamará a san Juan María como "patrono de todos los sacerdotes del mundo" Cabe destacar que el papa en estos 12 meses publicará el "Directorio para Confesores y Directores Espirituales" junto a una recopilación de textos del pontífice sobre temas esenciales de la vida y misión sacerdotal en la época moderna: sin dejar a un lado la lucha en oración, siempre de rodillas, como lo insiste el padre Jesús, para pedir a Dios vocaciones sacerdotales. Que bello, Padre Jesús servir a Dios en el Ministerio sacerdotal. Juntos iniciamos con “muchos” esta hermosa aventura y con el recuerdo y la mano en el corazón oramos por ellos, pero de manera muy especial, por el eterno Diácono, ahora sacerdote Sebastian Luis Rivas Córdova, párroco de San Agustín de Casanay y el siempre querido Padre Arturo Andrade Domínguez, quien se encuentra en la Diócesis de Carúpano. Déjenme, pues, terminar con una invitación y una oración. Una invitación a todos para que nos acompañen para el 29 de julio en una celebración Eucarística presidida por Monseñor Mariano Parar Sandoval, quien para nuestra ordenación fuera el Rector del Seminario San José, del cual salimos y hoy nos sentimos muy agradecidos. Y una oración que brotó del corazón del santo Juan Bautista María Vianney TE AMO, OH MI DIOS Te amo, Oh mi Dios. Mi único deseo es amarte hasta el último suspiro de mi vida. Te amo, Oh infinitamente amoroso Dios, y prefiero morir amándote que vivir un instante sin Ti. Te amo, oh mi Dios, y mi único temor es ir al infierno porque ahí nunca tendría la dulce consolación de tu amor. Oh mi Dios, si mi lengua no puede decir cada instante que te amo, por lo menos quiero que mi corazón lo repita cada vez que respiro. Ah, dame la gracia de sufrir mientras que te amo, y de amarte mientras que sufro, y el día que me muera, no solo amarte pero sentir que te amo. Te suplico que mientras más cerca estés de mi hora final aumentes y perfecciones mi amor por Ti. Amén. |
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Dime que te cuento y te diré que aprendes Padre Marcelo Rivas Sánchez Una Cuaresma que se hace camino al encuentro con Dios del perdón. De seguro en estos tiempos la palabra cuaresma tenga un sabor a penitencia, dolor, sacrificio e incluso a una búsqueda en la oscuridad. Una oscuridad en medio de una densa niebla que no nos deja ver la claridad de la vida. Pues, a pesar de esta visión pesimista y atrasada, va le la pena hacer un pequeño esfuerzo y tratar de comprender, en estos cuarenta días antes de la Semana Santa, que Dios sale al encuentro de cada uno en el afán de hacer caer en la cuenta de que el perdón es tan necesario como el aire para la vida. Lo importante de la cuaresma no es que comida dejamos o que limosna regalamos. Lo que importa es cómo te sientes delante a tu hermano, tu familia, tu vecino, tu compañero de trabajo, tu… Es la relación que tengamos con el otro y desde ahí medir tu grado de alegría, de servicio, de felicidad. Aquí, para esta reflexión cuaresmal, hablaremos del perdón. Vivimos en una sociedad de insultos, sátiras, ofensas, gritos, escándalos y mucho más que no me atrevo a enumerar por respeto. Pero si estamos en una sociedad de mucho enfrentamiento. Entonces, lo que importa no es que el otro me perdone, sino que yo aprenda a perdonar. Pareciera que nos estamos acostumbrando a vivir en la violencia y ser protagonistas de odios y traiciones. Tengo que decir perdón y de corazón por pertenecer a una sociedad fragmentada y confusa que sale al encuentro de los otros con las manos empuñadas y los labios apretados. Es una nueva actitud que hace tiempo abandonamos y despreciamos por una forma violenta de contestar y humillar. Creo que vale la pena pedir una disculpa y hacerlo siempre. Somos responsables de romper la fraternidad con situaciones violentas, engañosas y palabras hirientes. Entonces, pedir perdón se nos impone como una norma, como una necesidad y sobre todo, como una manera de vivir en sociedad. Es un perdón que me grita a la conciencia para llamar mi atención en esa solidad para con los que sufren y mis manos se mantienen cerradas. Es como si ya no me preocupo por los demás y todos ya no fueran mis hermanos. Es el perdón por el fracaso de la palabra, del diálogo, de la escucha. Por todos los conflictos que se podrían evitar con la verdad, con palabras claras, con una actitud honesta. Es un perdón que se hace escándalo cuando hago silencio cómplice delante de la injusticia. Una injusticia que se esconde en mis verdades a medias, mis faltas de valor para hablar, preguntar, pedir, decir . Es casi un conflicto y al taparlo me sella y me coloca en el olvido de los mejores sueños. Es un perdón que se quiere imponer pero como voy distraído lo meto en lo más profundo de mi elegante maleta de viajero que mucho sabe de caminos y nada de comprensiones. Encasillado, escondido, refugiado sigo ocultando los mejores talentos. “No me importa” “Ese no es mi problema” Es como si la vida siguió de largo y me ha quedado sin energías para llegar hasta el final. Como si un miedo detuvo mis fuerzas y cerró todas las puertas. Sabiendo que son idioteces, tonterías las que me detienen y no me dejan avanzar al encuentro, la paz, el perdón. Entonces… Es cuaresma para perdonar Es cuaresma para encontrarnos. Es cuaresma para sanar. Es cuaresma para unirse Y sobre todo, es cuaresma para buscar a Dios. Debemos comprender que nadie se salva en soledad y mucho menso a costillas de los demás. La salvación es una lucha de todos los días con todo y con todos. Por eso querer salvar el alma es arar en el mar, si no hablas con el hombre de carne y hueso que necesita ser escuchado, amado, perdonado y de forma muy especial acompañado. Dios se hará realidad en cada uno en la medida en que cada uno le demuestre el amor que por odiar hemos suprimido. Hay que predicar el amor y ese amor nos arrancará del corazón todo el odio y rabia que hayamos acumulado. Esta, entonces, será la fuerza que venza al mundo. No nos cansemos de predicar el amor, aunque veamos que olas de violencia vienen a inundar el fuego del amor cristiano. Tiene que vencer el amor. Es lo único que puede vencer. Vencerá porque es el proyecto de Dios. No es mi proyecto, no es tu proyecto. Es Dios que lo lleva y lo bendice. Recordemos para nunca olvidar: en el espejo del odio se miran los enfrentados y a cada uno le sale la venganza de la rabia y la arrogancia. Perdonar es el camino. Porque sin perdón nos e podría vivir. |
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Dime que te cuento y te diré que aprendes Padre Marcelo Rivas Sánchez Persona que no dialoga deja de ser persona
Toda persona, vida en Dios y esperanza de un país, tiene dentro de sus muchas joyas el diálogo como una herramienta para ser escuchado y escuchar. Saber dialogar es uno de los mejores regalos que puedes brindar a los otros y que te puedes dar a ti mismo. Cuando sabes escuchar, mejoras tu comunicación, y cuando mejoras tu comunicación, mejoras tus relaciones. Es de mucha importancia el que podamos relacionarnos con los demás. Para ello hay que ser afables, hospitalarios, sinceros en las palabras y en su corazón, prudentes y con mucha discreción. Sin olvidar la generosidad y la disponibilidad para el servicio siempre atento y deseoso de una respuesta. Esto lo podemos apoyar en 1 de Timoteo 3, 1-5 y Tito 1, 7-9. En la actualidad estamos creando un ambiente de mucho materialismo donde cada uno se está encerrando y perdiéndose en una masificación y soledad muy terribles. DE ahí, que hoy, afirmemos con fuerza que “Una persona que no dialoga deja de ser persona” Porque el saber dialogar es muy importante y en muy malo cuando una persona cree tener la razón siempre en todo. Ante esto se perderán ocasiones preciosas para aprender de los demás, enriquecer su mundo interior y recibir luces útiles para su actuación En el camino de la vida. Todos necesitamos aprender a dialogar y hacerlo con todo tipo de personas y mentalidades. Por eso no hay que confundir autoridad con atenta escucha. Quien gobierna, quía y lleva adelante alguna dirección necesariamente tiene que dialogar, es decir, hablar y escuchar. Pues todos son necesitados de que se les explique, s eles atienda y sobre todo se les oiga para facilitar la comunicación y las relaciones cotidianas. Dialogar no significa ser debilucho y mucho menos indiferente. Todo lo que sucede a nuestro alrededor es importante y más aún, mucho más importantes son las personas. Una persona convencida de lo que está haciendo habla, se deja escuchar y escucha con atención al otro. Esa solidez no significa rigidez, y mucho menos imposición. Aquí no se trata de vencer sino de con-vencer. No hay mayor peligro que el salir a convertir al otro en esclavo de lo que uno dice y cree. Tenemos que ser artistas para el dialogo y de una manera muy especial en el trato cotidiano. DE ahí que tenga que insistir en los cinco pasos del diálogo:
Dialogar es dar y recibir, enseñar y aprender. Por ello, en la vida de comunidad, que eviten con cuidado las discusiones inútiles o nocivas para la caridad. Es muy triste que motivos para el dialogo se escondan en el chisme, la critica destructiva, el pase de factura, la venganza y una difamación que casi es común y corriente. Aquí sería muy conveniente volver sobre el Nuevo Testamento: “no hables mal los unos de los otros. El que habla mal de un hermano o juzga a su hermano, habla mal de la ley y juzga a la ley” (Santiago 4,11) En este tiempo que estamos viviendo hay situaciones muy dolorosas donde la falta de dialogo han separado comunidades, sectores, calles, veredas y vecinos de muchos años de sana ya legre convivencia. Bien decía San Francisco de Sales “Más atrae una gota de miel que un barril de vinagre” y digo esto porque nos maltratamos, nos agredimos verbalmente con tanta fuerza que duelen más las palabras que los golpes. Al dialogo se une, con mucha prudencia, el saber guardar silencio y escuchar. Muchos se nos acercan con problemas y lo único quede san es que los escuchemos con paciencia y amor. Saber interesarse sinceramente por los demás, por lo que les interesa, por lo que piensan y dicen. Una persona que tiende siempre a acaparar la conversación con sus propios intereses impedirá una sana comprensión de la situación y un mejor camino para soluciones efectivas. Nos falta mucha delicadeza, comprensión, cercanía, afabilidad. La delicadeza enseña a dialogar serenamente, sin discutir, sin herir ni ofender. La comprensión nos descubre como personas que guardamos silencio y damos atención (normas del buen oyente) No todo tiene que ser dicho, se puede mirar y escuchar con el corazón. La cercanía nos lleva a guardar con respeto lo que nos han contado. Por eso nunca podemos hacer de una información un tema de conversación. Cuando se observa a un gobierno que no quiere dialogar por el bien de la patria y su propio interlocutor es el capricho de un proyecto que solo es realizable por los que piensan así. Ciertamente hay confusión y tristeza. O cuando se observa a una oposición que no mejora sus relaciones y siguen separados en diatribas partidistas y en esa buscadora de puestos y privilegios la tristeza se hace mayor y al soledad envuelve. La persona dialoga, escucha y tiene una apertura mental. Esa persona siempre aprenderá algo ye se algo lo podrá colocar al servicios de otros. Es, entonces, colaborador de Dios y se sentirá siempre nuevo. Roguemos al Señor Dios, del dialogar y la escucha, que nos brinde la oportunidad de aprender a escucharnos para sentirnos cada día más hermanos y más personas. Amén.
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Dime que te cuento y te diré que aprendes Padre Marcelo Rivas Sánchez Cuaresma el mejor tiempo para encontrase con Dios Una vez leí algo que decía así: “Dios inventó el tiempo para dar una oportunidad a las mejores ideas” Y de se invento maravilloso llamado tiempo, la Iglesia nos presenta hoy un espacio de cuarenta días, que llamamos “CUARESMA” que prepara la Semana Santa, es decir, ese poder reflexionar para vivir los misterios de la salvación que Dios Padre quiso regalarnos en Cristo Jesús. En este tiempo nos proponen, a la luz de la Palabra de Dios (Biblia), un programa de vida muy claro y muy exigente. El centro de todos estos cuarenta días es la conversión y la fe. Se nos está pidiendo de una manera muy seria que volvamos a Dios y así podamos ser testigos de la verdad y del amor. Una conversión que nace en el corazón, en la verdad de lo que somos, sentimos y hacemos. Una conversión como fruto de la misericordia de Dios, “que no quiere la muerte del pecador, sino que se convierta y viva”. ¡Es la Buena Noticia que nos ha traído Jesucristo! Para la Cuaresma la prioridad es que cada uno de nosotros, desde el corazón, viva su interioridad y se encuentre con Dios. De ahí que nos señale un camino bien trazado y seguro: 1) La limosna . Jesús nos enseña el estilo propio de hacer caridad: en secreto, sin ostentación alguna, buscando únicamente complacer a Dios y llevar a cabo en el mundo su santísima voluntad. Es una caridad para con los pobres, con los enfermos, con los ancianos. Somos muchos que nos cuesta encontrarlos. ¿No hay barrios pobres, no hay pobres en la parroquia? Pero también ese poder revisar el amor en la familia, en la vecindad 2) La oración . Tal vez sea el momento oportuno, en este tiempo de cuaresma, para revisar la oración de la mañana y de la noche. Hacer un esfuerzo papá y mamá de bendecir la mesa con la familia alrededor. Siempre sabiendo que para el cristiano lo que cuenta es que, cualquiera que sea la actividad espiritual, sea un verdadero encuentro con Dios Padre en la intimidad del corazón. 3) El ayuno. Que no es otra cosa que tener cierto control del consumismo, del materialismo, del hedonismo, del erotismo. Ayunar un poco de cines, de fiestas, de gastos innecesarios y poder entregar ahorros a quien de verdad los necesita. Aquí lo importante es el gozo espiritual con que se afrontan todas estas situaciones, un gozo que repercute en la actitud y en el comportamiento para con Dios y para con los hombres. Desde estas ayudas el hombre tiene que actuar con humildad, sencillez y reconociendo que somos frágiles y que algún día daremos cuentas a Dios. Como signo la cuaresma se inició con la imposición de la ceniza en la frente. Que es una invitación a una verdadera conversión y a la fe en el Evangelio. Esa cruz en la frente va acompañada de una frase lapidaria y bien entendida: “Recuerda que eres polvo y en polvo te convertirás” Todos sabemos que el Señor no se conforma con las apariencias. Quiere una conversión real y sincera: la que se origina en lo más profundo del corazón. Se nos invita a ese cambio de mentalidad, como respuesta de fe auténtica. No es la justicia practicada delante de los hombres la que salva, sino la verdad de un corazón que siente la necesidad e ser amigo de Dios. Pero mucho cuidado con ser trágicos y creer que la cuaresma es un final sin esperanza o que este tiempo es tiempo para llorar y sufrir. El amor vence las cenizas de un hombre viejo y desgastado. De un hombre pecador pero jamás derrotado. Podemos, desde hoy, decirle a Dios con toda la fuerza: “misericordia, Señor, hemos pecado” que es una realidad de la condición humana. Desde aquí nos podemos acercar a la auténtica reconciliación. Eso sí, sin esconderse en el disfraz o la máscara del engaño y la mentira. Pues somos muchos los que jugamos a las escondidas con Dios. Un ratico aquí, otro ratico allá. Una mascarita por aquí, otra más allá. Entonces, ¿de qué ha d esconderse el hombre? De todo lo malo, de lo que divide y enfrenta, de lo que le hace daño a tu familia y a la de los demás. Entonces, en cuaresma nos preparamos, como el deportista que necesita entrenamiento. En este tiempo nos entrenamos a fondo en la categoría del amor. Claro que habrá obstáculos, caídas y muchas rivalidades. Pero Jesucristo saldrá nuestro encuentro para poder hacer el mejor esfuerzo y poder renunciar a todo lo malo y colocar frutos de conversión a favor de una vida más santa en la lucha cotidiana. Vayamos juntos a correr por cuarenta días en donde iremos descubriendo lo más entrañable del misterio cristiano: un Dios hecho carne que va a entregarse, día a día, por cada uno de nosotros. Esto requiere de pensar mucho, pues es el hombre que piensa y sabe pensar. De Reflexionar, es decir, revisar el pasado. Hacer un chequeo de la vida, de la conducta, de la familia, del trabajo, de las relaciones interpersonales. De Corregir, típico de todos es equivocarse. No importa los errores cometidos, con tal que haya honestidad para dar marcha atrás. De Enderezar, pues hay vidas que se van torciendo. Hay muchos torcidos. Por eso es la gran oportunidad para el sacramento de la Penitencia, de la confesión, la conversión, el cumplimiento pascual. Por eso a la cuaresma la llamamos el mejor tiempo para la conversión. Tiempo de volver a Dios y de volver a nuestro prójimo. No podemos continuar viviendo de un modo egoísta buscando nuestros propios intereses. Dios, Todopoderoso y eterno, que durante cuarenta días y cuarenta noches ayunaste, permite que cada uno de nosotros, ayune de toda maldad que nos aleja de tu infinito amor. Amén. |
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Dime que te cuento y te diré que aprendes Padre Marcelo Rivas Sánchez REFLEXIONES PARA EL CAMINO Cuando se gana se gana y no interesa por cuanto. Pero, en estos momentos, después de haber aceptado toda la maquinaria del estado frente a una oposición y permitir volver a decidir lo que ya se había dicho que no. Sin dejar de reconocer que el gobierno se impuso. Vale la pena hacer unas cuantas reflexiones, muy serias.
NO =5.040.082 45,63% Diferencia 963.512 Abstención de 5.901.385 Es muy triste observar a las personas, abstencionistas, que poco le importa la situación por donde avanza Venezuela y la situación por la cual está atravesando la cantidad de personas que han sido vejadas, humilladas, arrinconados, sin olvidar, a los presos políticos y a los que se han tenido que ir del país por la violencia.
SI = 226. 053 67,78 % NO= 107. 408 32,21 % Diferencia = 118. 645 Abstención = 200. 539 Al mirar observo, que nuestro estado cada día está más desmejorado y esos 200 mil que no fueron a votar están diciendo que no les importa la situación y que están gozando porque van de bajada y son completamente indiferentes al grado de quedarse con los brazos cruzados. Claro, el miedo paraliza, la muerte enferma y la situación ante la vida de olvido, abandono hace que "muchos" se crucen de brazos. Yo no estoy justificando, simplemente reseño, pero no estoy de acuerdo con quedarse insensiblemente sin participar. La pregunta es: ¿Qué hacer delante de tanta desidia a la hora de votar y participar? No es fácil, cuando se ha abandonado a la gente y los "dirigentes" Líderes sociales, más que políticos, se han refugiado en otras cosas y no dan soluciones delante de la pobreza creciente en este estado. A esto debo agregar y llamar a una profunda reflexión: es muy triste la visión que tienen los jóvenes de Sucre. No existen. No pintan. No llegan a mover las masas que se han detenido sin participar. Porque una cosa es cierta, que esos 107. 408 que acudieron a decir que No , lo hicieron de forma libre, animada y con principios bien serios delante de la situación . Incluso arriesgando que les falten el respeto por parte de los contrarios. Pareciera que la universidad los aburguesó y los detiene en un eterno bonche lleno de ruidos de carros y movimientos corporales en bailes que nos les permite ofrecer más sacrificio que estudiar para pasar un examen y no prepararse para la vida del mañana. A todos les digo, que hoy más que nunca, hubo una victoria moral, donde cada uno, de los que fueron a votar, supo saltar todos los obstáculos de un estado que enfiló todas sus baterías para aplastar, amedrentar e incluso obligar a todo que se opusiera. Esta vida, que es una sola, donada por Dios y cuidada por Él, sigue su curso y ese caminar tiene que mirar para los lados reconociendo los errores y tratando de hacer nacer más conciencia en la necesidad de despertar y no dejar que el miedo nos aplaste. " La única cosa de la que debemos tener miedo es del miedo" (Franklin Delano Roosevelt, 1933) |
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Dime que te cuento y te diré que aprendes Padre Marcelo Rivas Sánchez Los pobres no pueden seguir siendo manipulados "El voto es secreto, no se dejen presionar" (Cardenal Jorge Urosa) En nombre de los pobres se han cometido muchos errores. En estos momentos se les manipula y en nombre de ellos se hace una campaña de desprecio y en ofensa a su dignidad. Los buscan dentro de un plan electorero y como amarrados los hacen venir a colocar una decisión que para ellos tiene valor económico dentro de una lista diabólica de 400 bolívares al entrar al centro electoral y otros 400 bolívares al salir o en una lista le hacen llegar a su casa un objeto de línea blanca y luego tienen que ir con el encargado de la lista a votar por lo que ellos le han señalado. Estos pobres, que son una gran mayoría, no pueden seguir siendo carne de cañón o conejillos de indias delante de un proceso electorero donde los intereses partidistas están por encima de la libertad y la decisión de personas con deberes y derechos. Por eso no puedo aceptar esta situación de manipulación donde la compra de conciencias es el único fin para ayudar a los más pobres. Me resisto a aceptar que desde los ranchos más destartalados y bien pobres tengan que hacerse presente con una franela, un color y una falsa sonrisa delante de un premio económico o un regalo. Ellos siempre más pobres. Ellos cada día con mayores dolores por el abandono y la desidia son mostrados como trofeos de guerra de una lucha de engaños y ofrecimientos en metálico para responder a una opción que tiene un precio que va contra la dignidad de todo hombre, de toda mujer. Da tristeza como los remolcan. Da lástima como los van llevando para luego volverlos a dejar en esos lugares de miseria y abandono. Es como aquella Roma de emperadores que daban pan y circo a los explotados para calmarlos delante del hambre y la pobreza. Ellos, esos pobres, claramente necesitados reciben el dinero o los regalos porque los necesita y en esa necesidad son abusados. Moralmente no se puede justificar lo malo. Dios manda a darle al César lo que es del César y a Dios lo que es de Dios. Comprar a una persona, hacerla obedecer por miedo, por arrinconamiento, por persecución política es inmoral y está contraria a los principios vitales de la dignidad de toda persona. Aceptar dinero para callar la conciencia es un pecado, aunque esos dineros sean del pueblo. Cuando un hombre humilde, pobre y necesitado acepta dinero o regalos a cambio de un voto está vendiendo el principio de la libertad; además, está siendo de muy mal ejemplo para sus hijos. Mañana un hijo se vende a un narcotraficante, se deja manipular por un aberrado sexual con qué fuerza le puede reclamar o con qué cara le puede reclamar. Se está creando un gran mal moral donde todo es permisivo, nada es malo y hay que aprovechar toda oportunidad. De ahí se observa como ante un accidente en carretera se desvalija a los ocupantes y al propio vehículo; cuando un camión tiene un desperfecto mecánico los habitantes de determinada zona se aprovechan para saquearlo. O cuando un delincuente no es castigado por los responsables de impartir justicia la misma gente toma la justicia por su mano es señal de venganza y rabia. Hemos caído en una sociedad de cómplices donde todo es una oportunidad para hacerse ricos, para agarrar y aprovecharse de los momentos. Vuelvo a insistir con mucho sentimiento: que en cada pobre hay personas y no sujetos de manejo y manipulación. En cada pobre hay una persona con aspiraciones y ansias de libertad. En cada pobre está Dios quien construye día a día una vida para el mejor esfuerzo. En cada pobre hay una familia con deseos de trabajo, de progreso y de tener igualdad en el trato y en las aspiraciones. Entonces, tenemos que decirle no a la manipulación, a ese traer amarrados a unos cuantos para que digan lo que ellos quieren que se diga. En cada uno de nosotros debe estar siempre un ser libre que desde Dios siempre ha sido así y que nadie puede quitarnos o manipular. Para todos, cada elección es un acto libre para elegir lo mejor y esto es moralmente bueno, pero obligar, llevar amarrados, engañados dentro de una comercialización es un acto inmoral y profundamente portador de secuelas muy peligrosas para el futuro moral de un país que más que elecciones necesita unirse para sacar adelante dentro de una familia al venezolano del mañana. |
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Dime que te cuento y te diré que aprendes Padre Marcelo Rivas Sánchez El silencio y mucho menos el miedo nos va a proteger. "La violencia antirreligiosa nunca se ha dado en Venezuela, por eso invito a los ciudadanos a rechazar estas agresiones"(Cardenal Jorge Urosa Sabino) Papá siempre me decía que no había mayor violencia que la que se hace desde el poder. El había vivido la persecución y el abuso de la dictadura de Pérez Jiménez, especialmente la aplicada por la seguridad nacional. Hoy, con mucha tristeza observo esto en Venezuela. Lo digo por la forma como desde arriba se invita a utilizar la violencia y el enfrentamiento. Hay, desde el alto gobierno, muchos sentimientos de odio, ira, ansia de venganza, indignación… Cómo si existiera "dentro de ellos" una situación muy triste donde no hay perdón, y mucho menos, deseos por encontrarnos y desarrollarnos como hermanos en una Venezuela de iguales. De ahí se desprende una intranquilidad unida a la violencia delincuencial de muchos jóvenes agrupados en bandas y creando una enorme sangría. Ya nosotros, como Iglesia Católica, vivimos la persecución y el arrinconamiento: pintas en las puertas de las Iglesia, insultos a las autoridades eclesiásticas, invitación a los fieles a dividirse y enfrentarse católicos frente a las sectas protestantes, quitar las ayudas económicas para las obras sociales que la Iglesia por años y años ha mantenido…Todo esto crece en tiempos de campañas electorales donde todo se altera y se le da rienda suelta al insulto, al enfrentamiento creando un ambiente muy hostil donde las palabras van y vienen dejando inmensas heridas. Para una muestra un botón. Delante de la guerra de Gaza el gobierno se involucró y trajo un odio al punto de observar un rechazo por la comunidad Judía e Israelita que vive en Venezuela al punto que la Sinagoga de Maripérez fue saqueada y violada. Esto provoca que la comunidad Judía dijera: "esta agresión es producto del "clima antijudío" que se ha desatado en el país "como consecuencia del discurso incitador al odio del Gobierno Nacional" Entonces, la violencia genera más violencia y todo el país con una paz intranquila avanza observando a sus estudiantes y a la espera de algo que traiga la tranquilidad y augure espacios de diálogo y encuentro. Lo que pasa que el gobierno no da espacios para la conversación pacífica y productiva. Si no se piensa como ellos somos enemigos. Proceder conforme a la Constitución es un pecado e incluso hay una invitación a volver a las listas de quienes a favor y de quienes en contra. Clara acción de una persecución y arrinconamiento para quienes no están de acuerdo con las políticas que se están aplicando. Una sociedad para ser de iguales tiene que respetarse y en el respeto está el poder tomar decisiones y nadie puede ser desechado por pensar diferente o decidir libremente. Aquí, ellos hablan de libertad, de que todos pueden opinar. Pero al hacerlo somos agredidos, golpeados e incluso tildados de delincuentes. Con asombro observo como un Alcalde de elección popular, como el de la Alcaldía Mayor de Caracas no puede operar en las oficinas que por naturaleza son de una alcaldía por la violencia de grupos anárquicos y el gobierno sin hacer nada. Es como permitir y dejar pasar. O el caso de Maradona que vino a Venezuela e hizo campaña a favor del gobierno y eso es bueno, pero viene otra persona y favorece a la oposición y es expulsado. Son situaciones muy tristes pero reales que suceden y eso es violencia verdadera. O es que, ¿echar gas del bueno a lo estudiantes no es violencia? Hay un país intranquilo donde desde el poder se abusa y ese abuso deber terminar muy mal. Pues no hay mal que dure cien años, ni cuerpo que lo resista. Todo tiene su tiempo y el tiempo de la paz se impone por la fuerza de la convivencia. La gente quiere vivir en sana paz. La gente quiere trabajar y llevar el pan y la alegría a los hogares. Todos queremos que todos progresen y que mi vecino tenga lo mejor. Pero así en enfrentamiento, rabia y odios, no se puede vivir. Hay que tender puentes, construir aliviaderos y suprimir tanta rabia. El arte de gobernar es darle a la mayoría la mejor forma de vida. Cuando se gana en comicios electorales es la voz de la mayoría la que se impone para acallar la fuerza de las armas o la degradación en la violencia. No hay otro camino, el camino verdadero es la paz. Hay que perdonar ya que es un acto de la libertad, al perdonar, uno es magnánimo pues ve en el otro la dignidad de cada persona, es decir, su valor por el simple hecho de serlo, por ser una creación de Dios... aunque ese otro no haya visto nuestro valor al lastimarnos o lastimar a quien más amamos. Claro que es muy difícil. Pero Dios en su infinita bondad nos ha puesto el ejemplo. Recordémosle en la Cruz, minutos antes de expirar y morir, pidió al Padre por nosotros "Perdónales que no saben lo que hacen"... Así mismo te diría yo, ante esta cruenta realidad pídele al Padre que te ayude a perdonar y pide por toda esta gente que tanto mal ha hecho pues te aseguro que no saben en verdad lo que hacen. Sabiendo que muchos no sabemos orar. Es el momento de la oración. Del poder que no nos debe cansar para que nos de la fortaleza y no hagamos simple silencio o nos refugiemos en el miedo que paraliza y guarda más rencores. De seguro, remedio infalible, la oración para que Dios haga posible que estas personas encuentren en El la paz, el consuelo, la esperanza y la fortaleza espiritual para salir adelante ante un poder que los enloquece y los aleja de la verdad "En silencio o en un puro conformismo se nos está escapando la vida. Hay que estar despiertos y sin miedo" |
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Dime que te cuento y te diré que aprendes Padre Marcelo Rivas Sánchez LA GUERRA NO AYUDA NADIE. ES DESTRUCCIÓN. Hay dolores que matan y mantienen la muerte a boca de jarro sin que nadie haga nada, todo lo contrario, buscan, por todos los medios, encender las fogatas del enfrentamiento y la división. Lo que empieza a suceder en nuestro país y a lo que se ha querido llamar, aquello que decía: "Candelita que se prenda. Candelita que se apague" Ahora es, "échenles gas del bueno" No es otra cosa que una situación muy dolorosa, pues están motivando la confrontación de venezolanos contra venezolanos. Cosa que resulta altamente preocupante y muy triste. Pues, para mí, quien dirige no puede llamar a la violencia, mucho menos, hacer que estudiantes sean vistos como delincuentes. En los días inmediatamente posteriores a la rendición de Japón en 1945, un niño, huérfano de guerra, llamado Seita pasa los días abandonado por todos en la estación Sannomiya de Kobe. Nadie se ocupaba de los niños huérfanos. Son entonces las luciérnagas las que acompañan a estos niños antes de saborear la muerte. Digo esto, porque ante tanta violencia verbal que viene del alto gobierno hacen falta luciérnagas que alumbren, como cocuyos de esperanza a hombres y mujeres de buena voluntad para que no hagan caso a los llamados de la guerra, que en definitiva, lo que traen es destrucción, desolación y muerte. Recuerdo a Thomas Merton, uno de los maestros espirituales de nuestro tiempo. Quien a los 23 años comienza a leer las Confesiones de san Agustín y queda tan fascinado que se convierte al cristianismo y es bautizado en la Iglesia católica el 16 de noviembre de 1938; en el 1942 entrará en la Trapa de Nuestra Señora de Getsemaní (Nueva York) Desde entonces simultaneará la vida contemplativa, con la reflexión, la escritura y la lucha por la paz en la guerra de Vietnam y los derechos civiles de la población negra en Estados Unidos. Le recuerdo porque afirmaba con vehemencia que todo es santo. Lo único que hace falta es tener ojos para verlo. Entonces nos faltan ojos para saber buscar la paz y dejar a un lado la guerra. En cada uno de los templos, a la hora de la santa misa, todos los fieles sin excepción, oran por la paz. Ese orar que es por todos, es una invitación principalmente a la paz particular de cada uno. Es una oración para recuperar la cordura y aprendamos a resolver nuestros problemas, lo mejor que podamos, juntos, en lugar de prepararnos para un enfrentamientos donde la amenaza se hace instrumento de guerra por los que tienen el poder. "Si salgo del poder habrá guerra" Venezuela en estos años ha vivido un vía crucis y las imágenes están a la vista: hombres rotos que por no arrodillarse están sin trabajo y colocados en sus casas como jarrones chinos; niños abandonados que fueron llamados como lo mejor de la patria y ahora crecen y crecen en mayor pobreza; mujeres heridas delante de la sangría en barrios, avenidas y calzadas que en libre delincuencia les han arrebatados sus hijos… Es un vía crucéis real y no inventado que conduce a la muerte al igual que a Cristo en la cruz. Pareciera que no se puede convivir con ideas diferentes. Pareciera que el que piensa diferente es mi enemigo y tengo que sacarlo del camino. "Quítate para ponerme yo" sería la consigna a seguir o la inclinación muy demoníaca y brutal dentro de un país que siempre ha vivido en la convivencia y la cordialidad. Hoy, delante de la verdad, nos toca a todos girar un poco el rumbo de la vida hacia Dios. Necesitamos con urgencia volver a comenzar. Lo que se suele llamar en tiempo de Cuaresma "Conversión" Cambio admirable hacia lo bueno y lo mejor. Lo que está en juego es nuestra vida. Esa vida diaria y común que todos queremos disfrutar. La vida que está impregnada en nuestra familia, en nuestro trabajo y en esa necesidad de relacionarnos y hacernos cada día más y mejores hermanos. Hay que dejar el camino del mal, es decir, del enfrentamiento y la rabia para dejar que el otro piense y actúe a su manera. Claro dentro de la justicia y el respeto. Pero no podemos apoyar a quienes tienen el poder y desde allí inventar y falsear la verdad en base a amenazas, terror, persecución y sobre todo, tratar de concebir la verdad desde mi único punto de vista. La Guerra no le hace bien a nadie. En la guerra perdemos todos, por eso, todo, necesitamos de conversión. Nadie quiere matar a nadie. Nadie quiere ser asesino de su hermano, mucho menos, siervos que ahorquen a sus jefes. Dios quiere siervos que finalmente puedan convertirse en hijos. Más que tragar para hartarse, Dios quiere que todos comamos y si sobra lo podamos repartir. El hoy es muy difícil para un pueblo que se ha cansado de ser explotado, pero también muy cansado de ser manipulado. Llamar a la guerra es una cuestión muy, pero muy peligrosa pues al perder la esperanza en quienes fueron elegidos por libertad democrática, no quena más salidas que el enfrentamiento y la rabia. Dios luchó, desde la duro del desierto, por un pueblo libre y sanado de las heridas del pasado. Despertar esas heridas hoy en día es un riesgo que se puede devolver y acabar con todos. A todos, les invito, a no dejar de buscar, de esperar, de aguardar. Con Dios todo. Sin Dios nada. |
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Dime que te cuento y te diré que aprendes Padre Marcelo Rivas Sánchez Santa Inés. Por siempre Nadie, por ningún motivo, puede negar la labor desarrollada por sacerdotes que en tiempos pasados desde Macuro hasta Santa Fe. Capuchinos y Dominicos se enfrentaron a la adversidad de la selva, a los soldados españoles y a los indígenas para hacer que ese corazón de piedra se convirtiera en corazón de carne. Fue un proceso de catequesis y encuentro. Sin querer tapar todos los errores y desafueros fue un encuentro de dos mundos y sin caer en la leyenda negra de la famosa resistencia indígena que abre surcos y venas buscando despertar venganza y abrir cicatrices. Es y será una rica historia de intercambio cultural donde la Santa Inés forma parte como devoción privada y luego asumida por un pueblo que no quería la guerra sino la paz. Ella será por siempre la guardiana de la ciudad que como faro alumbra a todos y que esa luz atraiga los mejores para alcanzar la paz que tanto nos falta. Ella, desde lo alto de su templo augusto y de tiempos, quiere abrazar a todos para que…
Santa Inés por siempre está y estará al servicio de todos, de manera especial para los jóvenes, que en ella encuentran dinamismo de encuentro con Dios con una vida limpia y sana frente a cualquier vicio o apetencia materialista. Santa Inés por siempre para animar a los Grupos que, sin causar divisiones, buscan unir y hacer sentir los mejores esfuerzos para una comunidad más humana y menos alejada del amor de Dios. Señor Dios, ayer celebramos a Santa Inés, patrona de la ciudad de Cumaná. Hoy con infinita gratitud le regamos a través de Ella, la bendición y la protección. Amén. |
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Dime que te cuento y te diré que aprendes Padre Marcelo Rivas Sánchez Divina Pastora enséñanos a vivir lo mismo con la Virgen del Valle La Divina Pastora es la patrona de Barquisimeto y cada 14 de enero celebra una multitudinaria procesión, casi tres veces más gente que en las fiestas del Valle, donde la gente llena de fe y esperanza acude a recibir su bendición. Ella se deja llevar hasta la capital, Barquisimeto, para luego buscar a todos en cada uno de los centros pastorales de la Arquidiócesis. Su historia está centrada en una imagen de aspecto campesino, de sombrero pastoril, con un manto azul. Sostiene la Niño con la mano izquierda y la derecha la tiene sobre en un cordero. Recibiendo el nombre de "Divina Pastora de Almas" Pero vámonos para el año 1740 cuando el Vicario de la Inmaculada Concepción de Barquisimeto quiso para su Iglesia una imagen de la Divina Pastora y al mismo tiempo el cura párroco de Santa Rosa del cerrito, Sebastian Bernal, quería una Inmaculada para su templo. Los dos habían hecho el encargo al mismo escultor. Pasado el tiempo las imágenes llegaron y los envíos se confundieron. El Padre de Santa Rosa del cerrito al observar la equivocación mandó a cerrar el cajón y que lo regresaran a Barquisimeto, pero estaba tan pesado que nadie podía moverlo. De este suceso da fe el hermano Nectario María y desde ese momento se quedó allí. El 14 de enero de 1856 el padre José Macario Yépez al observar la mortandad debido a la epidemia del cólera imploró a la Divina Pastora protección y al responder favorablemente en agradecimiento la Imagen recorre los caminos desde Santa Rosa a Barquisimeto, que hoy en día, es más que tradición es agradecimiento del bueno. Para el año 1956, centenario de la procesión se le corona canónicamente, bendición bien logara por Monseñor Críspulo Benítez Fontúrvel, obispo de la Diócesis. La historia es historia y no cuento. Pero la fe en ella se ha mantenido y ha crecido cada día más y más. Por eso, se hace necesario, que nosotros los que habitamos en el oriente del País, veamos este acontecimiento como un ejemplo vivo del agradecimiento de Dios, vivo y real, que actúa a través de acontecimientos salvíficos para llamarnos a la conversión. Debemos, nosotros, los que vivimos en estas tierras orientales, aprender lo siguiente:
Ojalá, de corazón, amáramos a la Virgen del Valle, como ellos aman y testimonian a La Divina Pastora. |
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Dime que te cuento y te diré que aprendes Padre Marcelo Rivas Sánchez Bienvenidos Reyes Magos y déjennos la luz para este camino. Cristo, nacido en el portal de Belén, luz maravillosa que a través de la estrella guío a los Reyes Magos, sigue siendo la luz para todos los pueblos. Nosotros, Estado Sucre, Venezuela, no podía quedarse por fuera. Para todos Cristo, "sol que nace de lo alto" (Lucas 1,78) Esplendorosa luz que vino para disipar la tinieblas y así iluminar a todo hombre. Dios es luz. No simple luz. Sino la mejor luz. L a única luz. "Yo soy la luz del mundo; el que me siga no caminará en la oscuridad, sino que tendrá la luz de la vida" (Juan 8,12) Es por tanto una luz completa y total que quiere meterse en la humanidad. No por fuera, sino por dentro. DE ahí que su encarnación sea real y necesaria. Real para iluminarnos y necesaria para salvarnos. En esa luz andaban los Tres Reyes Magos. En ellos la Manifestación. El darse a conocer a todos en respeto por la libertad de los hombres. Nada es obligado, Nada a la fuerza. Todo en conciencia y plena libertad de los hijos de Dios. Entonces, así como se manifestó a los pastores, sigue, hoy en día, manifestándose y revelándose como la luz de los pueblos en todos los pueblos tiempos y sitios. En los Magos, caminantes atrevidos y dispuestos; llenos de fe y de curiosidad; decididos y emprendedores esa luz toma forma de astro celeste (estrella) tan brillante que hace que la persigan y después de tanto recorrer son premiados con la mejor vista, el mejor paisaje: en un pesebre una familia celebra el nacimiento de su único hijo. Esa estrella, tan llamativa y tan llena de luz, se necesita para que nos alumbre el camino. Ella nos debe hablar a la mente y el corazón de todos. La que guió a los Magos debía iluminarnos también. Yo sé que por estos días se han vendido muchas estrellas y el mundo consumista a hecho de ellas una de las mejores ganancias. Incluso, en muchos hogares cuelgan sin saber su significado y su verdadero valor. En ellas tantos navegantes que se orientan por las noches en el anhelo por llegar, encontrar y regresar a casa. Por eso todos, sin excepción, debíamos sentir la necesidad de una estrella. No la de la suerte porque sería jugar a las escondidas con Dios y proseguir por rumbos equivocados donde la casualidad o la superstición son los vencedores. Es una estrella que elimine los odios de pueblos tan cercanos a la tradición cristiana. Hoy delante de la guerra en la franja de Gaza. O los pueblos que siguen corriendo la historia terrible del armamentismo y la guerra. Es una estrella que brille más que nunca para que entendamos la necesidad del encuentro y del perdón; del abrazo y la reconciliación; de la amistad y de la celebración. Es una estrella que nos sepa guiar sin caer en conformismos o alejamientos donde nada me importan los otros y mucho menos los más pequeños. De esos Reyes, tan queridos y apreciados por todos, hoy les rogamos que sigan viniendo pero que nos dejen la luz. Una luz tan necesaria para alumbrarnos. No pedimos ni oro, ni incienso, ni mirra. No queremos ser reyes, ni dioses, sino hombres de verdad que en esa claridad podamos caminar. Ustedes Reyes han vencido el cansancio del camino. Nosotros ya estamos cansados. Ustedes Reyes ya están entre nosotros. Nosotros contra nosotros. Ustedes Reyes no dejándose engañar por Herodes. Nosotros engañando y confundiendo. Entonces la llegada de los Reyes es un momento muy hermoso y muy elocuente. Hermoso por sus colores y regalos. Elocuente en el cumplimiento de esa gran promesa "La salvación es para todos" Si una carta hicimos para el Niño Jesús. Otra carta será para Ustedes. En esa carta más que letras apuñadas, una gran petición: Quédense entre nosotros y ayúdenos a encontrar la luz al final del túnel. Gracias por venir. Gracias por estar entre nosotros. Muchas gracias y que esa luz, que podemos tocar en cada Eucaristía, nos haga sentir cada día más y mejores hermanos. |
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Dime que te cuento y te diré que aprendes Padre Marcelo Rivas Sánchez Desde el Mensaje de Su Santidad Benedicto XVI por la Paz El Papa, al que todos quieren escuchar, con el lema "Combatir la pobreza, construir la paz" estará este 1 de enero del nuevo año enviando y bendiciendo a todos con el tradicional mensaje en la Jornada mundial por la paz. Su Santidad inicia la comunicación con todos deseando la paz, una paz que se alza en la compasión y el amor por los más pobres. Es la pobreza un gran conflicto que atenta contra la paz. Son muchos los que padecen la pobreza, pero que no se queda en no tener lo material, sino lo inmaterial donde la marginación, el apartar a los hombres del progreso, secuestrar sueños e impedir realizaciones personales y comunitarias. De seguro, afirma, el Papa, esa pobreza tiene la raíz en la falta de respeto por la dignidad tras trascendente de la persona humana. Todos los hombres tienen una gran vocación, a la cual Dios los ha llamado, y nadie la puede impedir. Dios va señalando el camino de la humanidad en armonía con la naturaleza "ecología humana" Donde el problema no es el número de sus habitantes, sino el trato y las condiciones de vida son prioridad. De ahí que el dolor, duele al mismo Dios y es Dios quien nos invita a vivir en la paz donde todos tienen cabida. Pasando por el respeto a la vida, a la libre elección de los conyugues a tener sus hijos. El Papa nos invita a mirarnos y tratarnos como hermanos dentro de un mundo de iguales. Nos lo repite: la población se está confirmando como una riqueza y no como un factor de pobreza. Hay que erradicar las enfermedades que disminuyen la vida, especialmente la de los más pobres. Las enfermedades llamadas pandémicas , como la malaria, la tuberculosis y el sida. Estas enfermedades al no ser tratadas afectan la dignidad de las personas, pues ante su presencia las personas son distanciadas, encerradas, mal vistas e incluso rechazadas. Por eso hay que utilizar caminos de solución con campañas a favor de la vida. Donde no se escatimen esfuerzos económicos y se atiendan a todos por igual. Sin dejar de recordar que cuando la enfermedad llega son los más pequeños, los niños los que sufren y llevan la mayor carga de pobreza. No es el simple vaso de agua lo que la humanidad necesita, sino el vaso del amor y la solidaridad. Que son manos y brazos en vacunas, en personal médico, cuidar y proteger al medio ambiente: Sin olvidar que la familia es un pilar fundamental para el progreso de los pueblos y la estabilización de la vida. Vuelve el Papa con su insistencia en la defensa de la vida de ahí, que hace un llamado urgente al desarme. Se preocupa altamente del alto gasto para faenas militares. Acción que traería mayores problemas donde los "perros de la guerra" los únicos beneficiados se estarán dando el mejor banquete. La guerra no favorece a nadie, ni le hace bien a nadie. Pues el camino a la paz es la propia paz y jamás se podrá preparar la paz teniendo o almacenando armas. Cabe aquí recordar a Pablo VI quien gritó con voz de valiente: "el desarrollo es el nuevo nombre de la paz" Entonces, no es la guerra o sus preparativos los que alcanzan la añorada paz, es y para siempre, que al ahorrar en esos juegos de guerra se pueda ayudar para el desarrollo de las personas y de los pueblos más pobres y necesitados. Le sería muy útil a las sociedades cocinar en el mejor de los fogones donde el apetito humano saborea la mejor de las comidas. La comida del compartir en el gran esfuerzo de partir el pan que alcance a todos. Como aquella multiplicación de los panes que alcanzó y sobró en gesto de amor de un Dios que sabe de hambre y de alimentación. Todos por el pan de la vida y no por una vida en un simple pan. No a la especulación, no al acaparamiento, no al abuso de los precios y la insuficiencia de alcanzar el pan tan necesario para el desarrollo de la vida. No y siempre no a la marginación y mucho menos a beneficios más bajos y precios más altos. Desde esta tierra de gracia "Cumaná" la oración al Dios de la vida por todos y que en todos viva por siempre la paz que tanto bien hace a todos. Amén. |
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